Gran Bretaña aprueba modificar el código genético humano

AP
LONDRES

pesar de denuncias de que modificar el código genético humano viola principios éticos, la agencia británica a cargo de regular la fertilidad humana aprobó la solicitud de científicos para aplicar la técnica en un intento por combatir enfermedades hereditarias.

En un comunicado emitido el lunes, la Autoridad de Fertilidad y Embriología Humana declaró que autorizó la solicitud del equipo encabezado por Kathy Niakan para entender los genes que los embriones humanos requieren para un desarrollo saludable.

Niakan, del Instituto Francis Crick, vislumbra usar la modificación de los genes para analizar la primera semana del desarrollo embrionario. Los científicos dicen que la manipulación genética podría algun día conducir a tratamientos contra enfermedades hereditarias como la distrofia muscular o el VIH, que causa el sida.

Sus detractores advierten que manipular el código genético podría llevar en un momento dado a bebés humanos modificados genéticamente, con los que los padres buscan tener hijos con características físicas específicas, como el ser más altos, más fuertes o más inteligentes.

Paul Nurse, director del Instituto Francis Crick, dijo que las averiguaciones de Niakan «nos ayudarán a entender mejor el nivel de desarrollo saludable en la fertilización in vitro al examinar las etapas más tempranas del desarrollo humano».

El año pasado, investigadores chinos realizaron el primer intento de modificar genes en embriones humanos. El experimento fracasó, pero sembró la posibilidad de alterar genes para futuras generaciones.

La técnica de ingeniería genética fue desarrollada en parte en Estados Unidos y los científicos no han experimentado con el método en células animales ni humanas en el laboratorio. La ingeniería genética no se ha utilizado en ningún tipo de terapias todavía.

En distintas partes del mundo varían las normas sobre modificación genética. En Estados Unidos, los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos (NIH por sus siglas en inglés) no pueden dar fondos para este tipo de experimentos, aunque el financiamiento privado sí se permite.

Los críticos advierten que prácticas como estas podrían tener nefastas consecuencias.

«Este es el primer paso de un camino que los científicos han trazado hacia la legalización de bebés genéticamente modificados», expresó David King, del grupo Human Genetics Alert, que se opone a la manipulación genética.

El año pasado, los legisladores británicos votaron para permitir a los científicos crear bebés a partir del ADN de tres personas para evitar que sus hijos hereden las enfermedades potencialmente fatales de sus madres. De este modo, Gran Bretaña se convirtió en el primer país del mundo en permitir la modificación genética de embriones para ser transferidos a mujeres.