Estos son los 8 aspirantes que participarán en el primer debate republicano

Donald Trump no participará en el debate que se llevará a cabo el miércoles entre aspirantes a la candidatura presidencial republicana. Pero el expresidente está impulsando la conversación dentro y fuera del escenario del debate de todos modos.

Los simpatizantes de Trump, incluida la representante Marjorie Taylor Greene, estarán en Milwaukee. Hay dudas sobre cuántos miembros de su campaña podrán entrar en la sala de prensa de Fox News. La cadena ha restringido su acceso a menos que sean invitados de otro medio de comunicación.

Otros ocho candidatos cumplieron con los requisitos de donaciones y encuestas para estar en el escenario, de acuerdo con el Comité Nacional Republicano. Para los que no lo hicieron, perderse el debate podría ser un momento decisivo en sus campañas.

El locutor de radio conservador Larry Elder ha dicho que planea demandar al CNR por haber sido excluido, a pesar de lo que, afirma, son pruebas de que cubría los requisitos para el debate. Tampoco estaba claro qué haría el alcalde de Miami, Francis Suarez, tras sus comentarios en la Feria Estatal de Iowa de que podría abandonar la contienda si no pasaba el corte.

Para calificar para el debate del 23 de agosto, los aspirantes debían cumplir con los requisitos de encuestas y donantes establecidos por el CNR, a decir: Tener al menos 1% de apoyo en tres encuestas nacionales importantes o una combinación de encuestas nacionales y estatales anticipadas consideradas aceptables por el comité, entre el 1 de julio y 21 de agosto, así como un mínimo de 40.000 donantes, con al menos 200 en 20 o más estados.

Los candidatos también debían firmar una declaración en la que se comprometen a no participar en ningún debate que no sea auspiciado por el partido al menos 48 horas antes del debate del miércoles por la noche, según los criterios del comité, que también exigía a los participantes comprometerse por escrito a apoyar al eventual candidato del partido.

A continuación, se ofrece un vistazo sobre quién está adentro, quién está fuera y quién decidió no participar:

LOS QUE CALIFICARON

RON DESANTIS

El gobernador de Florida es considerado desde hace tiempo como el principal rival de Trump, y terminó en un distante segundo lugar en una serie de encuestas en estados de votación anticipada, así como en sondeos nacionales, además de recaudar una cantidad impresionante de dinero.

Pero en las últimas semanas, la campaña de DeSantis ha batallado para estar al nivel de las expectativas que generó cuando entró en la contienda. Despidió a más de un tercio de su personal en momentos en que informes presentados ante autoridades federales mostraban que su campaña estaba gastando dinero a un ritmo insostenible.

Si Trump se ausenta, DeSantis podría ser el objetivo principal de las críticas de sus rivales en el escenario del debate.

De acuerdo con personas familiarizadas con los planes de DeSantis que pidieron hablar bajo condición de anonimato para discutir su estrategia, la campaña lo está preparando para un incesante aluvión de ataques.

DeSantis ha estado participando en sesiones de preguntas y respuestas relacionadas con el debate al menos una vez a la semana, y ha contratado al experimentado estratega de debates Brett O’Donnell para que le ayude.

TIM SCOTT

El senador de Carolina del Sur ha estado buscando un momento de inflexión, y el primer debate podría ser su oportunidad.

Scott, un prolífico recaudador de fondos, inicia el verano boreal con 21 millones de dólares en efectivo disponibles.

En una encuesta aprobada para el debate en Iowa, Scott tuvo cifras de doble dígito, junto con Trump y DeSantis. El senador ha centrado gran parte de los recursos de su campaña en el estado de votación inicial del Partido Republicano, que está dominado por un electorado evangélico blanco.

Tras el debate, Scott empezará a llevar a cabo actos de campaña en los estados de Nueva Hampshire, Iowa y Carolina del Sur, donde tiene previstas cuatro paradas el lunes.

NIKKI HALEY

La candidata se ha enfocado en eventos de campaña en los estados de votación temprana, apelando a las multitudes a través de sus éxitos electorales, como derrocar a un eterno legislador de Carolina del Sur para luego convertirse en la primera mujer y la primera persona de una minoría étnica del país en gobernar el estado. Haley, que también fungió como embajadora de Trump en la ONU durante aproximadamente dos años, subraya con frecuencia su experiencia internacional y la amenaza que representa China para Estados Unidos.

Haley, la única mujer en la contienda republicana, ha dicho que los estudiantes transgénero que compiten en los deportes representan “el problema central de la mujer actual”, y ha sido elogiada por un importante grupo antiaborto, que la calificó como “dotada de manera única para comunicarse desde la perspectiva provida de una mujer”.

Ingresó a la contienda en febrero y ha recaudado 15,6 millones de dólares. No mencionó sus planes de emprender un ataque mientras hablaba con los periodistas en Iowa a principios de mes, pero Haley sí explicó por qué se presentó en la feria estatal con una camiseta en la que se leía: “Me subestimas, eso será divertido”.

VIVEK RAMASWAMY

El empresario de biotecnología y autor del libro “Woke, Inc.: Inside Corporate America’s Social Justice Scam” es uno de los favoritos de la audiencia en eventos con múltiples candidatos y obtuvo buenos resultados en las encuestas a pesar de no ser conocido a nivel nacional cuando ingresó a la contienda.

El equipo de campaña de Ramaswamy afirma que alcanzó el umbral de donantes a principios de este año. Recientemente lanzó su programa de recaudación «Vivek’s Kitchen Cabinet” a fin de impulsar aún más el número de donantes al permitir que los recaudadores de fondos se queden con el 10% de lo que aportan a su campaña.

Ramaswamy, que tiene una apretada agenda de campaña, no ha hecho prácticamente ninguna preparación formal para el debate, según un asesor de alto nivel que pidió hablar bajo condición de anonimato para discutir la estrategia de la campaña. El asesor dijo que pasará el día previo al debate jugando tenis y pasando tiempo con su familia.

CHRIS CHRISTIE

El exgobernador de Nueva Jersey arrancó su campaña presentándose como el único candidato listo para enfrentar a Trump. Christie instó al expresidente a “aparecer en los debates y defender su trayectoria”, y dijo que si no se presentaba era “un cobarde”.

El mes pasado, Christie, que inició su campaña en junio, dijo a la cadena CNN que superó los “40.000 donantes individuales en sólo 35 días”. También ha cumplido con los requisitos del sondeo.

DOUG BURGUM

Burgum, un adinerado exempresario de software que ahora se encuentra en su segundo mandato como gobernador de Dakota del Norte, está usando su fortuna para impulsar su campaña.

Anunció un programa este mes para entregar tarjetas de regalo de 20 dólares, “Tarjetas de ayuda por Biden”, como una crítica al manejo de la economía por parte del presidente Joe Biden, a unas 50.000 personas a cambio de donaciones de un dólar. Los críticos han cuestionado si la oferta viola la ley de financiación de campañas.

Aproximadamente una semana después de lanzar ese programa, Burgum anunció que había superado el umbral de donantes. Las campañas publicitarias en los estados de votación anticipada también lo ayudaron a cumplir con los requisitos de las encuestas.

MIKE PENCE

El vicepresidente de Trump había superado el umbral de las encuestas, pero tenía dificultades para reunir una cantidad suficiente de donantes, lo que dificultaba su clasificación para el primer debate.

Pero el 8 de agosto, la campaña de Pence anunció que había cruzado el umbral de los 40.000 donantes y que había sido el primer candidato que presentaba formalmente su cifra de donantes al Comité Nacional Republicano para verificación.

Un asesor que habló bajo condición de anonimato para discutir la estrategia interna dijo hace unos días que Pence había participado en aproximadamente media docena de sesiones formales de preparación para el debate hasta la fecha, incluyendo al menos una en la que un asesor de campaña previamente cercano a Trump interpreta al expresidente.

ASA HUTCHINSON

El exgobernador de Arkansas durante dos mandatos fue el último precandidato que cumplió con los requisitos del CNR. Luego de cumplir con los requisitos de las encuestas, pero trabajando lentamente para superar el umbral de donantes, Hutchinson dijo el domingo a la cadena CNN que por fin había superado los 40.000 donantes.

Hutchinson cumple con el molde de un republicano de la vieja escuela y se ha diferenciado de muchos de sus rivales republicanos por su disposición a criticar a Trump. Ha publicado peticiones en la plataforma X —antes Twitter— para donaciones de un dólar para ayudar a asegurar su lugar.

QUIÉN DECIDIÓ NO PARTICIPAR

DONALD TRUMP

El actual favorito del Partido Republicano cumplió hace mucho tiempo con los umbrales de encuestas y donantes. Pero Trump decidió no participar en el debate del miércoles, y posiblemente tampoco en cualquier otro que pueda seguir.

“El público sabe quién soy y conoce la exitosa presidencia que tuve”, publicó Trump en su red social Truth Social el fin de semana. “Por lo tanto, no asistiré a los debates”.

Su portavoz no aclaró de momento si el exmandatario planea no acudir a ninguno de los debates de las primarias o sólo a los que ya han sido programados. Trump también ha dicho que no firmará la declaración en la que se compromete a no participar en ningún debate que no sea auspiciado por el partido.

Trump ha estado sopesando varias opciones para emitir un programa a la misma hora que el debate, incluido el conceder una entrevista al exconductor de Fox News Tucker Carlson, que ahora tiene un programa en X, anteriormente conocido como Twitter. Trump tiene previsto viajar a Atlanta un día después del debate para entregarse a las autoridades para enfrentar cargos estatales de confabulación por sus presuntos esfuerzos para anular las elecciones de 2020.

LOS QUE NO CALIFICARON

FRANCIS SUAREZ

El alcalde de Miami dijo a The Associated Press el viernes que había clasificado para el debate, pero que los funcionarios del partido discreparon. Asesores de alto rango del CNR que hablaron bajo condición de anonimato para compartir las discusiones internas dijeron posteriormente que Suarez aún no había cumplido oficialmente los criterios, y Suarez no estaba entre los candidatos que figuran en la alineación oficial en el escenario publicada el lunes por la noche.

Suarez ha sido uno de los candidatos más creativos para aumentar el número de donantes. Ofreció la oportunidad de ver el debut del astro del fútbol argentino Lionel Messi como jugador del Inter Miami y dijo que quienes donaran un dólar tendrían la oportunidad de ganar boletos de primera fila.

Aún por debajo del umbral de donantes, copió la estrategia de Burgum al ofrecer una “Tarjeta de ayuda por Bidenomics” de 20 dólares a cambio de donaciones de un dólar. Un comité de acción política que apoya a Suarez lanzó un sorteo para tener la oportunidad de recibir hasta 15.000 dólares en matrícula escolar a cambio de una donación de un dólar a la campaña de Suarez.

LARRY ELDER

El locutor de radio conservador afirmó el lunes que había cumplido los requisitos del debate, compartió la carta enviada al director del debate, David Bossie, y dijo que tenía previsto llegar a Milwaukee el martes por la tarde.

Tras el anuncio del Comité Nacional Republicano, la campaña de Elder dijo que planeaba demandar al partido “por su intento de último momento de dejarlo fuera del escenario del debate, incluso después de haber cumplido -y en algunos casos, superado- todos los requisitos”.

PERRY JOHNSON

Johnson, un adinerado hombre de negocios de Michigan, pero prácticamente desconocido, dijo este mes en redes sociales que había alcanzado los 40.000 donantes. La semana pasada dijo que había cumplido con los demás requisitos y el lunes publicó una fotografía de su compromiso a no participar en ningún debate que no fuera auspiciado por el partido.

Pero después de que se anunció la lista de los participantes al debate del comité, en la que no estaba incluido, Johnson expresó su descontento: escribió en redes sociales que “el proceso de debate ha sido corrompido, simple y llanamente”, y añadió que estaría en Milwaukee el miércoles “y tendrá más que decir” sobre el proceso el martes.

WILL HURD

El excongresista de Texas —el último candidato en entrar a la contienda, el 22 de junio— ha dicho en repetidas ocasiones que no se comprometerá a apoyar al eventual candidato republicano, una postura que lo mantendrá fuera del escenario, incluso si hubiera alcanzado los números necesarios en las encuestas.