Biden permite que 800.000 inmigrantes se queden 18 meses
Unos 600.000 venezolanos y más de 200.000 salvadoreños que ya viven en Estados Unidos pueden permanecer legalmente otros 18 meses, dijo el viernes el Departamento de Seguridad Nacional, apenas una semana antes de que el presidente electo Donald Trump asuma el cargo con promesas de políticas migratorias de línea dura.
Las decisiones son las más recientes de la administración Biden en apoyo al Estatus de Protección Temporal, que ha ampliado drásticamente para cubrir a alrededor de un millón de personas. El TPS enfrenta un futuro incierto bajo el gobierno de Trump, quien intentó restringir drásticamente su uso durante su primer mandato como presidente.
El anuncio, que se produjo mientras el presidente venezolano Nicolás Maduro asumía su cargo para un tercer mandato de seis años en Caracas en medio de una condena internacional generalizada, se basa “en la grave emergencia humanitaria que el país sigue enfrentando debido a las crisis políticas y económicas bajo el régimen de Maduro”, dijo el departamento.
El Departamento de Seguridad Nacional citó “condiciones ambientales en El Salvador que impiden el regreso de las personas”, específicamente las fuertes lluvias y tormentas de los últimos dos años.
La designación TPS otorga a las personas la autoridad legal para estar en el país, pero no les ofrece un camino a largo plazo hacia la ciudadanía. Dependen de que el gobierno renueve su estatus cuando este expire. Los críticos conservadores han dicho que, con el tiempo, la renovación del estatus de protección se vuelve automática, independientemente de lo que esté sucediendo en el país de origen de la persona.
El Congreso creó el TPS en 1990 para evitar deportaciones a países que sufren desastres naturales o conflictos civiles, dando a las personas autorización para trabajar en incrementos de hasta 18 meses a la vez.
Alrededor de un millón de inmigrantes de 17 países están protegidos por el TPS, entre ellos personas de Venezuela, Haití, Honduras, Nicaragua, Afganistán, Sudán y Líbano. Los salvadoreños son uno de los mayores beneficiarios, habiendo obtenido el TPS en 2001 después de los terremotos que sacudieron al país centroamericano.
El TPS para los salvadoreños debía expirar en marzo de 2025 y se extendió hasta el 9 de septiembre de 2026.
Trump y su compañero de fórmula, JD Vance, sugirieron que reducirían el uso del TPS y las políticas que otorgan estatus temporal mientras buscan deportaciones masivas. Durante su primera administración, Trump puso fin al TPS para El Salvador, pero el proceso fue detenido en los tribunales.
El DHS dijo que la extensión del TPS para 234.000 salvadoreños que actualmente son beneficiarios del TPS se basa en eventos geológicos y meteorológicos. Las tormentas significativas y las fuertes lluvias en 2023 y 2024 continuaron afectando áreas fuertemente impactadas por terremotos en 2001.
En los últimos meses, los defensores han aumentado la presión sobre la administración Biden para que solicite extensiones del TPS para quienes ya lo tienen y para proteger a personas de otros países, como Guatemala y Ecuador.
“Esta prórroga es apenas una pequeña victoria”, dijo Felipe Arnoldo Díaz, activista de la Alianza Nacional TPS. “Nuestra mayor preocupación es que después de El Salvador, hay países cuyo TPS está por vencer y están siendo excluidos, como Venezuela, Nepal, Sudán, Nicaragua y Honduras”.
El dinero que los salvadoreños envían a casa es un importante apoyo económico para el país centroamericano, lo que podría complicar los esfuerzos para poner fin al TPS para un aliado de Estados Unidos. Trump ha tenido cálidas relaciones con el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, quien trabajó estrechamente con él para prevenir la inmigración ilegal a Estados Unidos. Las remesas ascienden a unos 7.500 millones de dólares al año.
Bukele es inmensamente popular, en gran parte porque sus medidas de seguridad de mano dura han acabado con las pandillas callejeras del país.
En marzo de 2022, las pandillas de El Salvador mataron a 62 personas en cuestión de horas, lo que llevó al Congreso a permitir un “estado de excepción” para que Bukele tomara medidas enérgicas, suspendiendo algunos derechos constitucionales y otorgando más poderes a la policía. Más de 83.000 personas han sido detenidas desde entonces, la mayoría encarceladas sin el debido proceso.
El Salvador cerró 2024 con un récord de 114 homicidios . En 2015, El Salvador tuvo 6.656 homicidios, lo que lo convierte en uno de los países más letales del mundo.
Para José Palma, un salvadoreño de 48 años que vive en Estados Unidos desde 1998, la extensión significa que todavía puede trabajar legalmente en Houston. Es el único de su familia con estatus temporal; sus cuatro hijos nacieron ciudadanos estadounidenses y su esposa es residente permanente. Si no se le extiende el TPS, podría ser deportado y separado del resto de la familia.
“Me da tranquilidad, es como una bocanada de aire fresco. Son 18 meses más de protección”, afirmó Palma. “Me ofrece estabilidad”.
Palma, quien trabaja como organizador en una organización de jornaleros, envía unos 400 dólares al mes a su madre de 73 años, quien está jubilada y no tiene ingresos.
