Arrestarán a padres por pagar a ‘coyotes’
Víctor Caycho
Washington Hispanic
l gobierno dio comienzo desde el fin de semana una nueva política que endurece su política inmigratoria, enfocada esta vez en los padres que dieron dinero a los contrabandistas conocidos como ‘coyotes’ para traer a sus hijos que cruzaron ilegalmente la frontera sur.
La medida, anunciada el viernes 30 por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE), originó varias redadas en una docena de estados, incluido Virginia, según revelaron organizaciones de defensa de los inmigrantes.
Señalaron que funcionarios del ICE han empezado a compartir información con los agentes de inmigración fronteriza –algo que no habían hecho antes- acerca de los familiares, radicados en Estados Unidos, de los menores no acompañados.
Las redadas están enfocadas en los “patrocinadores” de estos niños –padres o familiares-, que los tienen bajo su cuidado hasta que sus casos se resuelvan en las cortes de inmigración.
Varios padres de esos niños reportaron haber recibido visitas sorpresivas en las puertas de sus casas por parte de agentes de inmigración, haciéndoles preguntas acerca de sus hijos y exigiéndoles que los dejaran entrar. Una vez que los padres abrían la puerta o salían de la casa, los detenían.
Funcionarios del ICE defendieron estas acciones y confirmaron que habían comenzado la nueva iniciativa con el objeto de “desvertebrar y desmantelar” a los facilitadores del contrabando humano.
Dichas medidas –indicaron-, incluyen arrestar a los auspiciadores que han pagado a organizaciones criminales para traer niños de contrabando al territorio estadounidense.
Las comunidades inmigrantes, entre ellas la de origen hispano, recibieron un nuevo y severo impacto el fin de semana previo al Día de la Independencia de Estados Unidos.
En efecto, el gobierno dio a conocer que se pondrá en marcha un plan para localizar y arrestar a los padres y otros familiares que hayan contratado y pagado a contrabandistas –más conocidos como “coyotes”- para traer a sus hijos a Estados Unidos.
La medida fue difundida el viernes 30 por el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE por sus siglas en inglés), y señala que está enfocada en la necesidad de desmantelar las redes de traficantes que traen a personas de contrabando a territorio estadounidense a cambio de dinero.
Esos menores son entregados después a “patrocinadores”, casi siempre padres, parientes cercanos o amigos, hasta que cada caso se resuelva en las cortes de inmigración.
Ahora, el gobierno ha revertido esa política cambiándola por otra que comienza por arrestar a los patrocinadores.
“El ICE tiene como propósito desmantelar de principio a fin los mecanismos ilícitos que utilizan las organizaciones delictivas transnacionales y los facilitadores del tráfico de personas”, dijo a la prensa la portavoz del ICE, Sarah Rodriguez.
Las primeras acciones de este tipo ya se iniciaron en Virginia, Texas, Pensilvania, Nueva York y Nueva Jersey, según grupos defensores de los derechos humanos.
Elsy Segovia, abogada de inmigración en Newark, Nueva Jersey, reveló que agentes armados visitaron a su cliente el miércoles con el argumento de que verificarían un asunto relacionado con el número de Seguro Social de él, pero después anunciaron que lo investigaban por traer de contrabando a su sobrino salvadoreño de 16 años quien ingresó por la Frontera de Arizona la semana anterior huyendo de las pandillas en su país.
“Lo coaccionaron a que les diera su teléfono y le dijeron que si no nos dices la verdad, te cancelaremos tu estatus de protección temporal”, señaló Segovia, en referencia al programa TPS que autorizó a muchos salvadoreños vivir en Estados Unidos.
Comunidad reacciona
En Washington, DC, las reacciones de las organizaciones comunitarias fue de rechazo y protesta.
“Usar a los niños para perseguir y arrestar a sus padres acusándolos de contrabando humano, es decir, de contrabandear a sus propios hijos, es intolerable”, afirmó Maria Woltjen, directora ejecutiva del Centro de la Juventud por los Derechos de los Niños Inmigrantes.
Cory Smith, vicepresidente de Kids in Need of Defense (KIND), señaló que “arrestar a los patrocinadores de niños que han escapado solos y buscando seguridad de la violencia pandillera es extremadamente cruel y traumatizante para esos menores”.
Jessica Jones, consejera del Servicio Luterano de Inmigración y Refugiados, sostuvo que “cuando un padre que vive en Estados Unidos se entera que su hijo ha sido amenazado a punta de pistola y que podría morir en cualquier momento, a menudo hacen la única elección que tienen: pagar a un contrabandista para traer a su hijo”.
“Creo que todos debemos responder compasivamente a estas familias que tanto sufren”, expresó.