Trump limita ventas de activos de Venezuela

AP
Washington Hispanic

El presidente Donald Trump firmó el lunes una orden limitando la capacidad del gobierno venezolano de vender propiedades públicas, luego que el país sudamericano celebró elecciones que Washington consideró “una farsa”.

La Casa Blanca informó que la orden de Trump limitará la capacidad del gobierno venezolano de liquidar activos públicos «a precios mínimos a expensas del pueblo venezolano”.

Horas antes el gobierno de Trump dejó claro que considera una “farsa” la elección en Venezuela y se comprometió a tomar medidas rápidas para aumentar la presión económica y diplomática sobre el gobierno de Nicolás Maduro.

En Caracas, el canciller venezolano Jorge Arreaza rechazó las nuevas sanciones estadounidenses y acusó a Washington de adoptar medidas «absolutamente ilegales» para torcer el brazo de un país que el domingo mostró en los comicios presidenciales «una gran musculatura» para fortalecer su democracia, su independencia y su soberanía.

Arreaza agregó que «no hay ningún tipo de medida restrictiva, de medida coercitiva unilateral, ningún tipo de presión» que pueda intimidar a Venezuela, ni siquiera si se trata de una potencia como Estados Unidos ni de Trump, comandante en jefe del más poderoso de los ejércitos.

Mientras líderes mundiales rápidamente condenaron el proceso electoral, el vicepresidente estadounidense Mike Pence afirmó el lunes que la votación no fue “ni libre ni justa”. Dijo que fue un «proceso falso» cuyo resultado es ilegítimo y agregó que la decisión de llevar a cabo las elecciones fue “un golpe más a la orgullosa tradición democrática de Venezuela”.

“Estados Unidos se opone a la dictadura y está con el pueblo de Venezuela”, dijo Pence.

Insistió en que Maduro debe permitir el ingreso de ayuda humanitaria en un país donde la escasez generalizada de alimentos y la hiperinflación han alimentado la crisis social y la oposición al gobierno de Maduro.

Maduro ganó casi el 68% de los votos, de acuerdo con el Consejo Nacional Electoral, con más del 92% de las casillas electorales contabilizadas. Esa fue una ventaja de más de 40 puntos sobre su retador más cercano, Henri Falcón. Incluso antes de la votación, Estados Unidos instó a Venezuela a no celebrarla.

Al elevar la presión diplomática, el secretario de Estado Mike Pompeo advirtió que el gobierno de Venezuela «enfrenta el aislamiento de la comunidad internacional» hasta que restablezca la democracia y celebre elecciones libres y transparentes.

Pompeo mencionó varios ejemplos de cómo el gobierno de Maduro habría intervenido en el proceso electoral, entre ellos la represión de la prensa, el dominio oficialista sobre el consejo electoral, el silenciamiento de la disidencia y la exclusión de los principales partidos de la oposición. También acusó al gobierno de Maduro de racionar «selectivamente» el alimento para manipular los votos de los ciudadanos hambrientos.

“Estados Unidos está con las naciones democráticas en apoyo del pueblo venezolano y tomará medidas económicas y diplomáticas rápidas para apoyar el restablecimiento de su democracia», dijo Pompeo en un comunicado.