Trump se declara inocente a cargos federales de conservar ilegalmente documentos clasificados
Donald Trump se convirtió el martes en el primer expresidente en enfrentar a un juez por cargos federales. Se declaró inocente en un tribunal de Miami a decenas de cargos por delitos graves que lo acusan de acopiar documentos confidenciales y desatender las exigencias del gobierno de devolverlos.
La histórica comparecencia, que giró en torno a las acusaciones de que Trump manejó indebidamente los secretos del gobierno que debía proteger en su papel de comandante en jefe, dio inicio a un proceso legal que se desarrollará durante el punto más álgido de la campaña presidencial de 2024, y podría tener profundas consecuencias, no sólo para su futuro político, sino también para su libertad personal.
Trump se enfrentó a su lectura de cargos con su característica actitud desafiante, publicando en redes sociales ataques contra la fiscalía mientras se trasladaba en caravana hacia el juzgado, e insistiendo — tal como lo ha hecho durante años de problemas legales — en que no ha hecho nada malo y que estaba siendo perseguido por razones políticas.
Pero dentro de la sala permaneció sentado en silencio, frunciendo el ceño y con los brazos cruzados, mientras un abogado rendía su declaración de inocencia a su nombre durante un breve proceso que culminó sin la necesidad de que entregara su pasaporte o se restringiera su libertad de tránsito de alguna otra manera.
La lectura de cargos, aunque a grandes rasgos procesal, fue el capítulo más reciente de una serie de ajustes de cuentas este año para Trump, quien enfrenta cargos en Nueva York relacionados con los pagos que realizó a una actriz porno para mantener en silencio señalamientos de una relación extramatrimonial durante la campaña presidencial de 2016, así como investigaciones en curso en Washington y Atlanta debido a sus intentos de revertir los resultados de los comicios de 2020.
Siempre en modo de campaña, rápidamente cambió la solemnidad del juzgado por la festividad del Versailles, un emblemático restaurante cubano en el vecindario de Little Habana en donde sus simpatizantes lo recibieron cantándole “Feliz Cumpleaños” al exmandatario que el miércoles cumple 77 años. Los eventos consecutivos dejan al descubierto la tensión que enfrenta Trump en los próximos meses, mientras busca equilibrar su campaña con las visitas a la corte que son parte de su estatus como alguien que ha sido acusado formalmente de delitos graves en dos ocasiones.