Obama lucha por reforma de salud en el congreso

Washington Hispanic
AP

l presidente Barack Obama y el vicepresidente electo Mike Pence estaban el miércoles al mismo tiempo en el Congreso, cada uno animando a su bando a luchar por la suerte de la reforma del sistema de salud.

Pence aseguró a sus militantes republicanos que al asumir la presidencia Donald Trump tendrá como «la primera orden del día» derogar la reforma, pero advirtió que al hacerlo, su partido debe cuidar de no perjudicar a los ciudadanos.

Mientras tanto, apenas 16 días antes de dejar la Casa Blanca, Obama arengó a los legisladores demócratas, exhortándoles a recordarle a la ciudadanía sobre los beneficios de la nueva ley.

«Hay que proteger al pueblo estadounidense», dijo Obama al salir del encuentro, respondiendo a preguntas de los reporteros.

«Mantengan la lucha», dijo Obama a los congresistas demócratas en el encuentro, según el representante demócrata de Ohio Tim Ryan. «Cuenten sobre la gente que se benefició de esa ley. Mientras más cuenten esos relatos, mejor nos irá».

Pence habló con reporteros tras realizar un encuentro de una hora con republicanos de la Cámara de Representantes en el Capitolio. El representante Dave Brat, de Virginia, dijo que Pence les aseguró que la meta es redactar una ley que derogue la reforma de salud para que Trump la promulgue el 20 de febrero.

«La primera orden del día será derogar y reemplazar al Obamacare», dijo Pence usando el apodo que se le ha dado a la reforma. Aseguró que los estadounidenses «votaron decisivamente para tener un mejor cuidado de salud en este país y estamos decididos a darles eso».

Pence dijo que el equipo de Trump ya está trabajando con líderes republicanos del Congreso para abolir la ley de Obama, tanto con nuevas leyes como con decretos presidenciales que podrían ser aplicados por el presidente y por las agencias del gobierno.

Pence no especificó de cuáles medidas se trataba, pero el presidente de la cámara baja Paul Ryan dijo que se ha hablado de «alivio durante la transición». Esa frase se ha usado para referirse a asistencia a los consumidores en el período entre la eliminación paulatina de la norma aprobada por Obama y su reemplazo por la propuesta republicana, un proceso que probablemente tardará años.

Los republicanos han estado discutiendo sobre cuándo realmente serían derogadas las principales cláusulas de la reforma, algo que quizás se dará en 18 meses sino más. Se estima que eso es lo que tardará recabar el apoyo suficiente entre los legisladores republicanos para aprobar una ley que reemplace a la actual.