Realizan funerales para oficiales atropellados en Maryland
Jossmar Castillo
Washington Hispanic
l jueves por la mañana los estamentos de seguridad del condado de Montgomery y del Departamento Federal de Investigaciones (FBI) realizaron los funerales para Carlos Wolff y Sander Cohen, quienes murieron atropellados en la Interestatal 270 el 8 de diciembre pasado.
Carlos Wolff era un supervisor del FBI con 11 años de experiencia y Cohen, un inspector de incendio y bombero voluntario en el condado.
Ayer jueves, el gobernador de Maryland, Larry Hogan, participó del funeral de Cohen en la congregación B’nai Israel, en Rockville, y ordenó que la bandera ondeara a media asta en conmemoración de los dos oficiales.
Familiares y amigos de Wolff llegaron a Gaithersburg, Maryland, en donde se realizaría un servicio en su honor.
«El siempre se encargó de los hermanos y de la familia», dijo Chris Wolff, recordando a su hermano. Carlos era un ejemplo para él, tanto así que siguió sus pasos para formar parte de la fuerza policial.
Carlos Wolff tenía una esposa y dos hijos, un niño de 7 años y una pequeña de apenas dos. Tenía cinco hermanos.
El viernes Wolff viajaba con dirección al norte por la I-270 cuando al parecer sufrió un accidente que dejó su carro incapaz de funcionar. Sander Cohen, como bombero que es, se detuvo para ayudar al conductor del vehículo cuando fueron arrollados por otro vehículo.
Wolff fue trasladado de emergencia al hospital y personal de rescate de la misma estación a la que Cohen pertenecía trataron de socorrerlo en el lugar, sin saber que se trataba de su compañero. Los esfuerzos fueron en vano y al darse cuenta de quien era, el choque emocional fue aún más grande.
Cohen fue recordado como un héroe. «El subjefe Cohen no tenía idea de que dentro del vehículo que se detuvo para ayudar estaba otro oficial de la ley», dijo el coronel William Pallozzi, superintendente de la Policía Estatal de Maryland. «El subjefe Cohen nunca dudó en proveer ayuda».