En Virginia caen traficantes de red mundial de drogas
Dos peligrosos traficantes de drogas que planeaban un ataque con explosivos y armas de asalto para destruir un negocio rival en otro estado fueron capturados en Virginia, como parte de una gigantesca operación combinada de la policía federal (FBI) y otras agencias de seguridad en ciudades de Estados Unidos y Europa.
El anuncio lo hicieron el martes en conferencia de prensa el director del FBI, Christopher Wray, y el administrador interino de la DEA, Timothy Shea, en la sede del Departamento de Justicia, en Washington DC.
Wray dio a conocer que en el marco de la Operación DisrupTor fueron detenidos 179 traficantes de opio y otras drogas que formaban parte de una de las redes de Internet más grandes del mercado negro de drogas en el mundo.
De ellos, 121 fueron arrestados en Estados Unidos, 42 en Alemania, ocho en Holanda y cuatro en Gran Bretaña.
En la rueda de prensa, Wray confirmó que la oficina de Washington del FBI en coordinación con la fiscalía federal del Distrito Este de Virginia lograron frustrar un complot de ataque con bombas incendiarias contra un competidor en Nebraska.
En esta operación de seguridad en Virginia fueron capturados William Anderson Burgamy, de 33 años, residente en Hanover, Maryland, y Hyrum T. Wilson, de 41 años, de Auburn, Nebraska.
Ambos se declararon culpables de cargos relacionados con el tráfico de opioides y ese frustrado ataque.
Burgamy, quien no es farmacéutico, traficaba con drogas en el mercado negro desde el año pasado. Eilson, quien sí tiene licencia como farmacéutico, confesó haber enviado a Burgamy, más de 19 mil unidades de opioides, que sólo se expenden por prescripción médica, desde su farmacia en Nebraska. Burgamy, a su vez, vendió ilícitamente esas drogas a clientes en varios estados, obteniendo ganancias por más de 1 millón de dólares.
Fue en esas circunstancias que idearon incendiar en plena pandemia una farmacia rival en Nebraska, con el uso de bombas Molotov reforzadas con espuma de polietileno como agente activo, lo que fue desbaratado por la Operación DisrupTor.
Agentes de la ley les incautaron miles de pastillas opioides, además de ocho armas de fuego, entre ellas dos rifles de asalto AR-15 con cacerinas de alta capacidad, y dinero en efectivo.
La operación DisrupTor se enfocó en la red Darknet, que es una parte de internet encriptada y accesible solo a través de herramientas especializadas que ofrecen anonimato, sobre todo el navegador Tor, de donde proviene el nombre de la operación.
Como parte de la iniciativa, las autoridades incautaron más de 6,5 millones de dólares en efectivo y moneda virtual, además de 500 kilos de drogas, de acuerdo con el Departamento de Justicia.
Unos 275 kilos de drogas, incluidos fentanilo, heroína, cocaína, éxtasis y otros opioides, fueron incautados en Estados Unidos. La investigación continúa.
