Dejan otro bus lleno de migrantes en DC
Veinte días después de un primer envío, otro autobús lleno de migrantes procedentes de América del Sur fue dejado en las primeras horas de la mañana del jueves 6 de octubre, frente a la casa de la vicepresidenta Kamala Harris, ubicada en las inmediaciones del Observatorio Naval de Estados Unidos, en Washington, DC.
El autobús con placas de Texas se detuvo poco antes de las 5 de la mañana en la avenida Massachusetts, al noroeste de la ciudad, el conductor hizo abrir la puerta principal y cerca de medio centenar de mujeres, hombres y niños bajaron del vehículo en la capital de la nación.
Algunos niños todavía dormidos bajaron los escalones del autobús en hombros de sus padres, y la mayoría de los adultos llevaban pequeñas bolsas de plástico blancas, con algunas pertenencias, según difundió la emisora local WTOP.
Indicó que voluntarios de la organización comunitaria SAMU First Response, con sede en el Distrito y que ayuda a los solicitantes de asilo, estaban disponibles cuando llegó el autobús de Texas. Un anterior envío de migrantes arribó sin previo aviso el 15 de septiembre, a la misma locación.
Minutos después de su llegada y una breve explicación en español de los próximos pasos, los migrantes fueron subidos a dos autobuses más pequeños y llevados a alojamientos locales, informó un portavoz de los voluntarios.
Hasta la fecha, miles de recién llegados a la frontera han sido transportados desde estados con gobernadores republicanos, incluidos Texas, Florida y Arizona. Texas ha invertido más de 12 millones de dólares en esta nueva “estrategia”.
En septiembre, el gobernador de Texas, Greg Abbott, dijo que estaba “enviando un mensaje directo” a la vicepresidenta Harris al enviar dos autobuses de migrantes al Observatorio Naval.
Esta situación ya forma parte de la campaña electoral de cara a las elecciones de medio término que se realizan el 8 de noviembre.
Ante esta afluencia de migrantes, la alcaldesa de DC declaró una emergencia y estableció una Oficina de Servicios para Migrantes.
El Consejo de DC respaldó la legislación de emergencia de Bowser y acordó crear un fondo de 10 millones de dólares para establecer la oficina. Allí se brinda a los migrantes, recepción, descanso, comidas, alojamiento temporal, servicios médicos urgentes, transporte, conexión a servicios de reasentamiento y otros servicios.