Gran despliegue de fuerzas especiales contra las maras
Marcos Alemán
San Salvador, El Salvador / AP
l gobierno salvadoreño desplegó el miércoles 20 un contingente de 1.000 soldados y policías para buscar y desmantelar los grupos de pandillas que en las últimas semanas han emigrado a las zonas rurales, donde han perpetrado enfrentamientos armados con las fuerzas gubernamentales.
Las unidades especiales perseguirán a unos 100 cabecillas para neutralizar su actividad de conducción de estas estructuras criminales, informó el comisionado de la Policía, Marco Tulio Lima.
El director de la Policía, Howard Cotto, explicó que el batallón de fuerzas especiales tiene como misión “detectar, neutralizar, (y) detener aquellas estructuras delincuenciales que operan principalmente en las zonas rurales del país, aunque también lo hacen en zonas urbanas y semiurbanas, donde aterrorizan a los ciudadanos por medio del uso de armas de fuego”.
Pero destacó que harán un trabajo de inteligencia para detectar a los 100 principales cabecillas que actualmente no están detenidos y capturarlos para “neutralizar su actividad de conducción de sus estructuras criminales”.
Las tropas contarán con el apoyo logístico de comunicaciones y transporte, incluso helicópteros, para llegar a zonas remotas. Contarán con visores nocturnos, fusiles M-16, lanzacohetes y vehículos blindados equipados con ametralladoras M-60.
El vicepresidente de la República, Oscar Ortiz, que presidió el acto en la Brigada Especial de Seguridad Militar, donde antes funcionó la extinta Guardia Nacional, señaló que “ha llegado el momento de frenar, de revertir esta escalada de violencia que se nos instaló en los últimos años en el país y que tanto sacrificio y que tanto derramamiento de sangre ha producido”.
Ortiz se refirió a las medidas extraordinarias implementadas por el gobierno luego de una matanza de 11 trabajadores que se le atribuye a las pandillas, y que el gobierno puso en marcha al decretar el estado de emergencia en siete cárceles y aislar a los cabecillas de estos grupos criminales.
Días después la Asamblea Legislativa aprobó un paquete de medidas extraordinarias que afectan el sistema penitenciario y autorizó a las autoridades para someter a aislamientos severos a estos criminales.
Las autoridades sostienen que las órdenes de homicidios, extorsiones y otros delitos salen de las cárceles donde guardan prisión los principales cabecillas de las maras o pandillas.
Ortiz consideró que también es importante desarticular las estructuras de la extorsión que, según afirmó, es el medio con el que las pandillas se financian.