BID lanza informe sobre la calidad de vida en América Latina y el Caribe
Victor Caycho
Washington Hispanic
l Banco Interamericano de Desarrollo (BID) acaba de lanzar su primer informe anual ‘Realidades y Perspectivas’, en el cual toma el pulso de la calidad de vida de la gente en América Latina y el Caribe, es decir, cómo viven los latinoamericanos actualmente y qué significa nacer hoy en América Latina.
Este trabajo se desarrolló a través de dos de los economistas principales de su sector, Suzanne Duryea y Marcos Robles, según informó Héctor Salazar Sánchez, gerente del Sector Social del BID.
“En lo sucesivo, su lanzamiento se dará en el mes de octubre de cada año”, afirmó.
que el BID elabora desde hace muchos años un tema macroeconómico que se presenta durante su Asamblea Anual de Gobernadores. “Lo que no tenía el banco es un informe como el de ahora, que nos cuenta las tendencias y los temas del momento sobre los desarrollos sociales que están afligiendo, tanto en estructura como en coyuntura, a la calidad de vida en cada país”.
Destacó que la importancia del reporte “es señalar las tendencias, pero no estamos dando ninguna recomendación de política; es para que abramos un debate en búsqueda de soluciones”
Tanto Salazar como Duryea dieron a conocer a Washington Hispanic que el informe fue elaborado en base a encuestas armonizadas del BID que cubrieron un millón 800 mil hogares y en los que se analizó a 6 millones 800 mil personas individualmente.
Como conclusión, señalaron que el estudio muestra un panorama bastante sombrío para el futuro de la región, sobre todo a la luz de cuatro resultados de la mayor importancia.
“Uno de ellos es el tema de la desigualdad, que ha existido estructuralmente en América Latina y el Caribe a través de muchos años y que tiene que ver con la falta de productividad en la región, y con la calidad y desarrollo del capital humano”, afirmó Salazar.
“Se trata de una región de contrastes, con 186 millones de personas que pertenecen a la clase media, las que tienen un grupo preponderante de familias con ingresos entre 5 y 12 dólares diarios por persona, aunque estas últimas están en una situación vulnerable que podrían recaer en la pobreza”, explicó el funcionario del BID. “Es decir –prosiguió-, coexisten estos dos grupos, la clase media con esta población vulnerable, y detrás de esto está el tema de la desigualdad”.
Duryea, por su parte, señaló que otro hallazgo clave del estudio es que los niños son más vulnerables que el resto de la población, “y tienen hoy tres veces más probabilidades de sufrir pobreza extrema que los adultos mayores”.
“Si lo comparamos con cifras de 1996, hace 20 años, la probabilidad de esos niños de sufrir pobreza extrema era dos veces mayor. Ahora ha aumentado a tres veces”, observó.
“La situación de los niños está empeorando –continuó- y es preocupante porque esos niños son los que van a trabajar y a contribuir para el pago de las pensiones de los mayores en los próximos años”.
“Sin embargo –terció Salazar-, otro descubrimiento es que las mujeres están cambiando la dinámica familiar y transformando a nuestras sociedades en la región”. El estudio determinó que la contribución de las mujeres a los ingresos laborales del hogar ha aumentado en la región desde el 28 por ciento en el año 1996 a 35 por ciento en el 2014. “Es un avance muy fuerte y muy importante”, sostuvo.
MAS NIÑOS VIVEN CON UN SOLO PADRE
• Otro de los hallazgos dramáticos del informe del BID ‘Realidades y es que en la región de América Latina y el Caribe los niños tienden a vivir cada vez más con un solo padre o un adulto mayor.
• “Los adultos mayores tienden a vivir más solos o con su cónyuge y eso determina que aumenta el número de niños que viven con familias monoparentales”, señaló la economista Suzanne Duryea.
• Eso determina que tengan mayor rezago escolar, que estén más desnutridos y que reciban menos vacunas que aquellos niños que viven con ambos padres.