Dolphins cortan racha de 8 triunfos de Patriots
AP
Washington Hispanic
avien Howard interceptó dos pases de Tom Brady, quien no pudo convertir una sola vez en tercer down, y los Dolphins de Miami vencieron el lunes 27-20 a los Patriots de Nueva Inglaterra para cortarles una racha de ocho triunfos consecutivos.
Los pronósticos daban como favoritos por 11 puntos a los visitantes, pero los Dolphins (6-7) impidieron que los Patriots (10-3) aseguraran su noveno título seguido en la División Este de la Conferencia Americana.
“Fue una mala noche”, reconoció Brady. “Hemos tenido muchas buenas noches en este año. Ésta fue mala”.
Brady completó 24 de 43 pases para 233 yardas y una anotación. Miami lo capturó en dos ocasiones y lo golpeó en cinco.
Además, los Dolphins limitaron la ofensiva terrestre de Nueva Inglaterra a 25 yardas.
En tercera oportunidad, los Pats se fueron de 11-0.
“Durante cada partido nos concentramos en golpear al quarterback lo más duro que podamos y en hacer que se sienta incómodo”, dijo el tackle defensivo Ndamukong Suh. “Pienso que hicimos un trabajo bastante bueno en ese aspecto”.
Jay Cutler lanzó para 263 yardas y tres touchdowns, incluidos dos envíos de anotación a Jarvis Landry. Kenyan Drake acumuló 114 yardas por tierra y 79 con sus recepciones.
Un pase de anotación de Brady redujo el déficit a 10 puntos con 13 minutos por jugarse. Pero las tres siguientes posesiones de los Pats redituaron cinco yardas.
Tras un gol de campo de Nueva Inglaterra, Miami aseguró el triunfo recuperando una patada corta con 53 segundos restantes.
“Esto nos da impulso”, dijo Cutler. “Ganar es lo que te mantiene en este deporte. Y después de un triunfo, el vestuario es como ningún otro lugar”.
Los Dolphins vistieron sus uniformes de 1972 y lucieron como no lo habían hecho en muchos años.
En el tercer periodo, cuando Landry atrapó un pase de anotación, colocó el balón en el piso. Con mímica, hizo como si lo estuviera inflando como una bomba.
Fue una evidente referencia al escándalo de los balones desinflados que derivó en una suspensión contra Brady el año pasado.