Tras 11 años de investigación cae pedófilo en serie del DMV

Varios casos de pedofilia en serie que permanecían sin resolver desde hace once años en Washington DC y Maryland fueron al fin solucionados la semana pasada, gracias al trabajo denodado de varias agencias policiales, anunció el jueves el Departamento de Policía Metropolitana (MPD).

Alphonso Owens, de 42 años, residente de Washington, DC, fue acusado el jueves por grandes jurados en el condado de Prince George’s, Maryland, y en el Distrito de Columbia, por agresiones sexuales contra niños perpetradas en septiembre y octubre de 2011.

«Hemos estado trabajando en este caso a lo largo de 11 años, y es extraordinario que la investigación que inicié en ese año haya dado sus frutos”, dijo el lunes el oficial Scott Dowling, de la policía metropolitana, quien señaló que este hecho traerá algo de consuelo a las víctimas.

El 29 de octubre de 2011, la policía reportó que un extraño trepó por la ventana de un apartamento en la planta baja en la cuadra 3000 de Stanton Road Sudeste y agredió sexualmente a una indefensa niña de 11 años.

Luego huyó por la ventana. La menor inmediatamente despertó a su madre y le contó lo que había pasado, quien llamó a la policía.

Los investigadores pudieron obtener un perfil de ADN masculino parcial en el lugar; sin embargo, el caso o logró avanzar durante más de una década. La impresión de ADN fue enviada recientemente a varias rondas de pruebas más avanzadas, dio a conocer la policía.

Fue así como se obtuvo un perfil de ADN completo y la policía cargó esa muestra en una base de datos nacional:  la huella coincidía con la de Owens, quien actualmente cumple dos sentencias de cadena perpetua en Cumberland, Maryland, por otro caso de violación que cometió en Baltimore en 2015.

Los detectives también pudieron comparar el ADN de Owen del caso de DC con otro incidente similar ocurrido en el condado de Prince George’s, donde la policía dijo que otra niña de 10 años había sido violada.

Ese último hecho tuvo lugar en las primeras horas de la mañana del 26 de septiembre de 2011, cuando Owens irrumpió en una residencia de Oxon Hill y agredió sexualmente a un niño de 10 años y luego huyó. La víctima despertó a un familiar y llamaron a la policía.

A Owens se le presentaron recientemente las acusaciones ante la justicia, tanto en el condado de Prince George’s como en DC.

Está acusado de tres cargos de abuso sexual en primer grado con circunstancias agravantes y tres cargos de abuso sexual infantil en primer grado, también con circunstancias agravantes, indican documentos judiciales.

Los cargos en la acusación del condado de Prince George’s conllevan una sentencia máxima legal de cadena perpetua, con un mínimo obligatorio de 25 años, y registro de delincuentes sexuales de por vida, según la fiscal estatal Aisha Braveboy.

Los cargos en la acusación de DC conllevan una sentencia máxima legal de cadena perpetua sin posibilidad de liberación, dijeron las autoridades.

«Sin el esfuerzo cooperativo de ambas jurisdicciones, y trabajando juntas a lo largo del tiempo, no hubiéramos podido resolver este caso», dijo Alexander MacBean, de la policía de DC.