Twitter anuncia suscripción mensual con marca azul de cotejo
Twitter anunció un servicio de suscripción por 8 dólares al mes que incluye una marca de cotejo azul que hasta ahora se otorgaba sólo a las cuentas verificadas, al tiempo que su nuevo propietario, Elon Musk, renueva el sistema de verificación de la plataforma justo antes de las elecciones intermedias de Estados Unidos.
En una actualización para los dispositivos iOS de Apple disponible en Estados Unidos, Canadá, Australia, Nueva Zelanda y el Reino Unido, Twitter indicó que los usuarios que “se suscriban ahora” podrán recibir la marca de cotejo azul junto a sus nombres, “al igual que las celebridades, empresas y políticos que ya sigues”.
Si embargo, Esther Crawford, empleada de Twitter, tuiteó el sábado que “el nuevo Blue aún no está disponible; la carrera hacia nuestro lanzamiento continúa, pero algunas personas pueden vernos haciendo actualizaciones porque estamos probando e impulsando cambios en tiempo real”. Las cuentas verificadas no parecían estar perdiendo sus marcas hasta el momento.
Por ahora se desconoce cuándo se lanzará la suscripción. Crawford dijo a The Associated Press en un mensaje vía Twitter que llegará “pronto pero aún no se ha lanzado”. Twitter no respondió a una solicitud de comentarios.
La posibilidad de que cualquiera pueda obtener la marca de cotejo azul podría generar confusión y un aumento de desinformación antes de las elecciones del martes, pero Musk tuiteó el sábado en respuesta a una pregunta sobre el riesgo de que los impostores se hagan pasar por perfiles verificados —como políticos y funcionarios electorales— que “Twitter suspenderá la cuenta por intento de suplantación de identidad y se quedará con el dinero”.
“Entonces, si los estafadores quieren hacer esto un millón de veces, eso es sólo un montón de dinero gratis”, afirmó.
No obstante, muchos temen que los despidos generalizados que comenzaron el viernes puedan afectar el sistema de moderación y verificación de contenido de la plataforma social que las agencias públicas, las juntas electorales, los departamentos de policía y los medios de comunicación utilizan para mantener informada a la población.
El cambio representará el fin del sistema actual de verificación en Twitter que fue lanzado en 2009 para prevenir suplantaciones de cuentas de alto perfil, como celebridades y políticos. Antes del cambio, Twitter tenía unas 423.000 cuentas verificadas, muchas de ellas de periodistas de todo el mundo a quienes la compañía verificó sin importar cuantos seguidores tenían.
Los expertos han expresado preocupaciones serias sobre un cambio en el sistema de verificación en la plataforma que, aunque no es perfecto, ha ayudado a los 238 millones de usuarios diarios de Twitter a determinar si las cuentas de las que han recibido información son auténticas. Las cuentas verificadas actuales incluyen celebridades, atletas e influencers, al igual que agencias gubernamentales y políticos de todo el mundo, periodistas y medios de comunicación, activistas, empresas y marcas, y el propio Musk.
“Él sabe que la marca de cotejo azul tiene valor y está tratando de explotarla rápidamente”, afirmó Jennifer Grygiel, profesora asociada de Comunicación en la Universidad de Syracuse y experta en redes sociales. “Necesita ganarse la confianza de la gente antes de poder venderle algo».
La actualización que hizo Twitter a la versión iOS de su app no menciona la verificación como parte de su nuevo sistema de “marca de cotejo azul”. Hasta el momento, la actualización no está disponible en dispositivos Android.
Musk, quien anteriormente dijo que quiere “verificar a todos los humanos” en Twitter, ha afirmado que las figuras públicas se identificarán de otra manera que no sea la marca azul. Actualmente, por ejemplo, los funcionarios del gobierno se identifican con un texto debajo de los nombres que indica que están publicando desde una cuenta oficial del gobierno.
La cuenta @POTUS del presidente estadounidense Joe Biden, por ejemplo, señala en letras grises que pertenece a un “funcionario del gobierno de Estados Unidos”.
Lewis Hamilton, siete veces campeón de la Fórmula Uno y que tiene 7,8 millones de seguidores en Twitter, dijo a la AP: “Podría simplemente borrar mi cuenta de Twitter, nunca la uso. Me parece muy saludable eliminar las redes sociales de mi teléfono por períodos de tiempo”.
“Pero también es una herramienta realmente poderosa para conectarme con la gente, así que lo aprecio y trato de usarlo como eso y no como algo que me desvía del camino en el que estoy en la vida”, añadió.
El anuncio se hizo un día después que la compañía comenzó a despedir a empleados para reducir costos y cuando más compañías están pausando sus anuncios en Twitter en espera de cómo la plataforma va a operar bajo su nuevo dueño.
Aproximadamente la mitad de los 7.500 empleados de Twitter fueron despedidos, tuiteó Yoel Roth, jefe de seguridad e integridad.
Dijo que el personal de moderación de contenido de primera línea de la compañía fue el grupo menos afectado por los recortes y que “los esfuerzos en la integridad electoral —incluyendo información errónea dañina que puede suprimir el voto y combatir las operaciones de información respaldadas por el Estado— siguen siendo una prioridad máxima”.
El cofundador de Twitter Joe Dorsey asumió el sábado la culpa por esos despidos.
“Soy responsable por la situación en que todos se encuentran: Hice crecer la compañía demasiado rápido”, tuiteó el sábado. “Me disculpo por eso”.
Musk tuiteó el viernes por la noche que no tuvo otra opción que eliminar esos empleos, “mientras la compañía está perdiendo 4 millones de dólares al día”. No dio detalles sobre las pérdidas diarias en la compañía y dijo que a los empleados que perdieron sus puestos se les ofreció tres meses de indemnización por despido.
También dijo que Twitter ha registrado “una caída masiva en los ingresos” dado que los anunciantes enfrentan la presión de los activistas para que abandonen la plataforma, que depende en gran medida de la publicidad para ganar dinero.
United Airlines se convirtió el sábado en la última marca importante en suspender temporalmente su publicidad en Twitter, uniéndose a compañías como General Motors, REI, General Mills y Audi.
Musk trató de tranquilizar a los anunciantes la semana pasada al indicar que Twitter no se convertirá en un “infierno de todos contra todos” debido a lo que él llama su compromiso con la libertad de expresión.