Investigan abuso de antipsicóticos en asilos
El gobierno de Estados Unidos anunció que iniciará una campaña contra el abuso de medicamentos antipsicóticos y diagnósticos erróneos de esquizofrenia en los residentes de casas para ancianos.
Los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid iniciarán investigaciones este mes en asilos seleccionados para determinar si los diagnósticos del trastorno psiquiátrico son correctos.
A lo largo de décadas se han acumulado pruebas de que algunos asilos diagnostican erróneamente a los residentes con esquizofrenia o les suministran medicamentos antipsicóticos para sedarlos a pesar de efectos colaterales peligrosos, incluso peligro de muerte, sostuvo el organismo.
A ningún residente de una casa para ancianos se le debe diagnosticar erróneamente esquizofrenia ni se le debe suministrar un antipsicótico indebidamente», dijo el secretario de Salud, Xavier Becerra, en un comunicado. “Las medidas que tomamos hoy ayudarán a prevenir esos errores y dar tranquilidad a las familias”.
Algunos asilos podrían esquivar una inspección en torno al uso innecesario de medicación antipsicótica al clasificar a los residentes como esquizofrénicos, aunque no exhiban signos de un trastorno que es extremadamente raro, de acuerdo con un informe del gobierno el año pasado. Se cree que menos del 1% de la población padece esquizofrenia, caracterizada por delirios, alucinaciones y trastornos en el pensamiento.
En 2012, el gobierno federal empezó a rastrear el uso de antipsicoticos en los asilos, pero solo en residentes no diagnosticados con esquizofrenia, algo que puede afectar la calificación de la institución en una base de datos pública.
El suministro de antipsicóticos a los residentes de los asilos se ha reducido a menos de 20% en los últimos años, según datos federales.
Sin embargo, un informe de noviembre de la inspectoría general del Departamento de Salud reveló que el número de residentes reportados como esquizofrénicos sin el diagnóstico correspondiente aumento bruscamente de 2015 a 2019, y 99 asilos de todo el país reportaron que al menos el 20% de sus residentes padecen el trastorno.
“El número de diagnósticos de esquizofrenia no corroborados aumentó, y en 2019 estaba concentrado en relativamente pocos asilos para ancianos”, sostuvo el informe.
