Biden cierra su gira europea en Finlandia, el nuevo miembro de la OTAN
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, concluía el jueves su visita de cinco días en Europa junto a líderes nórdicos en un esfuerzo de mostrar el aumento del poder y la influencia de la OTAN ante una Rusia que busca expandirse.
La breve parada en la capital costera de Finlandia ponía fin a una gira cuidadosamente preparada para mostrar el crecimiento de la alianza militar, que según Biden se ha fortalecido desde la invasión rusa en Ucrania. Finlandia se convirtió este año en el miembro más nuevo de la OTAN, lo que en la práctica multiplicó por dos la frontera de la alianza con Rusia.
“Llevo mucho tiempo haciendo esto”, dijo Biden al inicio de una reunión con el presidente de Finlandia, Sauli Niinistö, en el palacio presidencial en Helsinki. “No creo que la OTAN haya sido nunca más fuerte”.
En efecto, Biden llegó a Helsinki tras lo que consideraba una exitosa cumbre anual de la OTAN en Vilna, Lituania, donde los aliados acordaron una declaración que allanaría el camino a Ucrania para ingresar en el grupo. El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, describió el resultado de la cumbre como “una victoria de seguridad significativa” para su país, aunque expresó su decepción porque Kiev no hubiera recibido una invitación directa para entrar en la OTAN.
Biden y otros miembros del gobierno también celebraron conversaciones con Ankara que según el equipo del presidente fueron cruciales, poco antes de que Turquía cambiara de parecer y retirase sus objeciones a la entrada de Suecia en la OTAN.
“Me siento bien sobre el viaje”, dijo el miércoles Biden a la prensa antes de volar a Finlandia. “Saben, hemos logrado todos los objetivos que queríamos alcanzar”.
Y pese a la frustración expresada por Zelenskyy, Biden -que se reunió con el mandatario ucraniano el miércoles por la tarde en Vilna- dijo el jueves que Zelenskyy «terminó muy contento».
El viaje de esta semana, una expedición cuidadosamente coreografiada que pretendía plasmar la oposición internacional a la guerra en Ucrania del presidente de Rusia, Vladímir Putin, se celebró casi cinco años después de que el entonces presidente Donald Trump hablara en Helsinki junto a Putin y pusiera en duda a sus propios servicios de inteligencia. Eso fue apenas unos días después de que Trump irrumpiera en una cumbre de la OTAN en la que menospreció a la alianza y amenazó a retirar a Estados Unidos.
Por el contrario, Biden ha abrazado con entusiasmo los pilares del multilateralismo que Trump rechazaba y habla a menudo de que tuvo que reconstruir coaliciones internacionales tras los cuatro accidentados años liderados por su predecesor. El sociable expresidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado está en su elemento en las cumbres extranjeras, y habla sobre cómo su experiencia en política internacional ha marcado una diferencia en su presidencia.
Durante su estancia en Finlandia, Biden también tenía previsto reunirse con líderes de otros países nórdicos: Suecia, Noruega, Dinamarca e Islandia. Suecia esperaba convertirse en el 32do miembro de la OTAN tras prometer más cooperación con Turquía en lucha antiterrorista y apoyar la candidatura de Ankara para entrar en la Unión Europea.