Acuerdo laboral evita una huelga ferroviaria
El presidente Joe Biden anunció el jueves un acuerdo laboral tentativo para el sector ferroviario, con lo que se evitó una huelga que probablemente habría sido devastadora para la economía.
Para lograr el acuerdo, los representantes de las empresas ferroviarias y del sindicato negociaron durante 20 horas en el Departamento de Trabajo hasta pasada la medianoche del miércoles, pues existía la posibilidad de que el viernes se iniciara una huelga que habría paralizado el transporte en las líneas férreas de todo el país.
El presidente invitó a líderes empresariales y sindicales a la Oficina Oval el jueves por la mañana y luego elogió el acuerdo en declaraciones en la Casa Blanca. “Este acuerdo es la validación de lo que siempre he creído: los sindicatos y los gerentes pueden trabajar juntos, pueden trabajar juntos en beneficio de todos”, declaró Biden.
Alrededor de las 9 de la noche del miércoles, cuando continuaban las conversaciones, Biden hizo una llamada crucial al secretario de Trabajo, Marty Walsh, dijo un funcionario de la Casa Blanca.
El presidente pidió a los negociadores que tuvieran en cuenta los perjuicios a las familias, los agricultores y los negocios si se producía un paro.
El producto de las negociaciones fue un acuerdo tentativo que irá a votación en los sindicatos después de un período de enfriamiento de varias semanas.
El acuerdo de cinco años, retroactivo a 2020, incluye los aumentos del 24% y 5.000 dólares en bonos que recomendó este verano una Junta Presidencial de Emergencia. Los ferrocarriles también acordaron relajar sus estrictas políticas de asistencia para abordar algunas de las preocupaciones de los sindicatos sobre las condiciones laborales.
En la Oficina Oval, un Biden radiante bromeó diciendo que estaba sorprendido de que todos estuvieran “todavía de pie” después de pasar parte de la noche en vela y que ya deberían estar “en casa y en la cama”.
La huelga también habría interrumpido el tráfico de pasajeros, así como los servicios ferroviarios de carga, porque la empresa de trenes Amtrak y muchos ferrocarriles de pasajeros operan en vías que son propiedad de los ferrocarriles de carga.
Amtrak ya había cancelado varios de sus trenes de larga distancia esta semana y dijo que el resto de sus trenes de ese servicio se detendrían el jueves antes de la fecha límite de la huelga.
Luego del acuerdo tentativo, Amtrak dijo que estaba “trabajando para restaurar rápidamente los trenes cancelados y comunicarse con los clientes afectados para acomodarlos en las primeras salidas disponibles”.