$2,500 millones para cargadores eléctricos
El gobierno anunció el martes 2.500 millones de dólares en nuevas subvenciones para la construcción de estaciones de carga para vehículos eléctricos e infraestructura de combustible alternativo, en parte con el objetivo de aumentar el acceso en vecindarios y comunidades desfavorecidas.
Conocidas como el programa de Infraestructura de Carga y Abastecimiento de Combustible (CFI), las subvenciones serán distribuidas a lo largo de un periodo de cinco años, con énfasis en cargadores en autopistas y en lugares en comunidades urbanas, rurales y tribales desfavorecidas.
El Departamento de Transporte señaló en un comunicado que las subvenciones estarán dirigidas a “llenar los vacíos en la red nacional de carga y abastecimiento de combustibles alternativos”.
El secretario de Transporte, Pete Buttigieg, declaró en el comunicado que el objetivo general es “modernizar nuestra infraestructura y crear buenos empleos en el proceso”.
Elogió los nuevos fondos, de los que dijo son “otro gran paso hacia la creación de un futuro para los vehículos eléctricos que sea conveniente, asequible, confiable y accesible para todos los estadounidenses”.
Los 2.500 millones de dólares en fondos se dividirán equitativamente en dos vías:
- Un Programa Comunitario que busca distribuir de forma estratégica los cargadores en lugares desfavorecidos dentro de ciudades y comunidades.
- Un Programa de Corredores, que se enfocará en las autopistas con el fin de establecer corredores de combustibles alternativos a fin de facilitar los viajes y el transporte de carga sin gasolina a través del país.
El dinero se suma a un fondo federal por separado de 5.000 millones de dólares para expandir una red nacional de cargadores para autos eléctricos a lo largo de carreteras.
El país ha estado dando prioridad a la construcción en autopistas que puedan permitir que los conductores de vehículos eléctricos recorran grandes distancias, a expensas, por el momento, de vecindarios, centros comerciales y centros residenciales en zonas más urbanas en donde ha habido una demanda relativamente mayor de cargadores.