PG pagará $20 millones por muerte de hombre esposado
En un acuerdo sin precedentes, calificado de “histórico” en fuentes judiciales, las autoridades del condado de Prince George’s, Maryland, se comprometieron a pagar 20 millones de dólares a la familia de un hombre que murió en enero de seis balazos disparados por un policía cuando estaba en custodia y con las manos esposadas a la espalda dentro de una patrulla policial.
“No hay ningún precio que se pueda poner por la vida de un hijo, un padre o un hermano, no hay un precio apropiado para cubrir una pérdida como ésta”, dijo el lunes la Ejecutiva del condado de Prince George’s, Angela Alsobrooks, al dar a conocer la decisión.
Al lado de ella lloraba Brenda Green, la madre de William Howard Green, la víctima, con quien residía en Washington DC. Estaban también los dos hijos adultos del hombre asesinado, Shelly y William Little. “Lamento profundamente esa pérdida”, les dijo Alsobrooks.
Shelly, la hija, expresó que la vida de la familia y de ella misma “cambiaron por completo” luego del crimen y adelantó que la familia usará los fondos del acuerdo para preservar el legado de su padre.
El monto acordado es el más grande que se haya decidido entregar en el país por el asesinato de una persona en manos de la policía.
La noche del 27 de enero, Green, de 43 años, fue detenido por el oficial Michael Owen, Jr., quien había acudido al área de Temple Hills en respuesta a un accidente de tráfico. En las cercanías encontró durmiendo a Green en el interior de su vehículo, aparentemente bajo la influencia de alguna droga, según reportaron los policías que llegaron después de Owen.
Luego Green fue esposado y llevado al asiento delantero del coche patrulla de Owen. Diez minutos más tarde se escucharon los tiros. Seis balazos acabaron con la vida del detenido. No quedó nada grabado porque Owen no llevaba ninguna cámara corporal.
Una portavoz de la policía de Prince George’s dijo al día siguiente que dos testigos dijeron haber escuchado una discusión entre Owen y Green. Pero después el jefe de policía del condado declaró que Green no parecía estar implicado con alguna droga y que tampoco se pudo confirmar que hubo una pelea o discusión entre Owen y el detenido. Ambos son afroamericanos.
Renne Joy, una fiscal que estuvo a cargo de la investigación, afirmó que Green acató las órdenes de los oficiales cuando lo sacaron del auto y lo esposaron. “Él no representaba ninguna amenaza”, dijo.
Alsobrooks, quien antes de ser Ejecutiva fue fiscal general del condado, reconoció que “cuando estamos en falta, asumimos la responsabilidad; y en este caso, aceptamos esa responsabilidad”. También dijo que el monto acordado provendrá del presupuesto de Prince George’s.
El policía Owen está detenido desde cuando mató a Green y ya fue acusado por los cargos de asesinato en segundo grado, homicidio involuntario y ataque. La fecha de su juicio ha sido programado para marzo de 2021.
Es el primer oficial en la historia del condado en ser acusado por asesinar a una persona en servicio, indicó Alsobrooks.