Investigan a gobernador de Virginia
Jossmar Castillo
Washington Hispanic
l gobernador de Virginia, Terry McAuliffe es el centro de una investigación federal encabezada por el Departamento Federal de Investigación (FBI) en la que han revisado las finanzas del político desde antes que llegara a ocupar la gubernatura.
De acuerdo con informaciones preliminares que surgieron a principios de semana, las pesquisas que adelanta la institución tienen que ver con supuestas donaciones ilegales que McAuliffe recibió durante su campaña electoral del 2013, sin embargo James Cooper, un abogado personal del gobernador ha dicho que ese no es el centro de la investigación, sino determinar si el gobernador cabildeó al gobierno de los Estados Unidos en favor de entidades extranjeras.
El anuncio de la investigación sorprendió a la comunidad de Virginia, puesto que su último gobernador, Bob McDonnell, enfrenta una pena de más de un año de prisión por cargos de corrupción durante su mandato.
El reporte inicial de parte de CNN, con ayuda de fuentes anónimas, es que un aporte de $120 mil del empresario chino Wan Wenliang a la campaña de McAuliffe fue lo que llamó la atención de las autoridades. Pero el gobernador ha declarado públicamente que no tiene nada que esconder y que está seguro de que no ha hecho nada fuera de la ley.
Aparte del FBI, la Oficina del Fiscal de los Estados Unidos y la Sección de Integridad Pública del Departamento de Justicia, están revisando el estado financiero de McAuliffe desde antes que se convirtiera en gobernador.
En un programa mensual que tiene en una radio local de Washington, McAuliffe aclaró que aunque Wenliang es chino, tiene residencia permanente de los Estados Unidos desde el 2007, lo que lo convierte en un donante legal.
El gobernador criticó al DoJ y al FBI por haber filtrado información sobre la investigación de la que aún sigue siendo objeto. “Es muy desafortunado que nuestras instituciones de integridad como la Justicia y el FBI filtren información”, dijo McAuliffe en el mismo programa radial. “Ellos deberían funcionar con estándares más altos. Pero vives en este mundo, estás en política. Estas cosas suceden”, siguió.
Cooper solicitó a los investigadores que, puesto que no hay indicios de que el gobernador haya incurrido en ilícitos, la investigación debería terminar.
