Grupo partidario de Maduro “toma” embajada en DC
Víctor Caycho
Washington Hispanic
La lucha por el poder político en Venezuela entre partidarios y opositores del régimen dictatorial de Nicolás Maduro se trasladó esta semana, aunque en menor escala, a la sede de la embajada venezolana en Washington DC, localizada en Georgetown, uno de los vecindarios más acaudalados de Washington DC.
El miércoles 24, cumpliendo el último plazo dado por el gobierno de los Estados Unidos para que abandonen el país, los diplomáticos abandonaron la embajada. Pero en su lugar dejaron a un grupo de activistas que se han puesto el nombre de “Codepink”, formado originalmente por mujeres estadounidenses identificadas como de izquierda, y que ahora apoyan a Maduro, para lo cual han reclutado gente que las acompaña en sus protestas en su afán de recolectar fondos.
La maniobra busca evitar que los diplomáticos designados por Juan Guaidó, el presidente encargado de Venezuela, y confirmados por la Asamblea Nacional (Congreso) de Venezuela, se hagan cargo de esas instalaciones localizadas en el 1099 de la 30th Street, en la zona Noroeste (NW) de la capital de la nación.
Agentes del Servicio Secreto montan guardia en las cercanías del edificio, en cuyas terrazas que dan a la calle el grupo colocó carteles de apoyo al régimen de Maduro.
Supuestamente dichos activistas recibieron las llaves de los diplomáticos venezolanos que abandonaron la sede diplomática. Incluso aseguran que ellos son “invitados de Maduro”, según declaró a la prensa Linda Hellard, una de las activistas. También pusieron candados y cadenas a la puerta principal.
Además, el jueves 25 salieron a las calles frente a la embajada para “protestar” por “la intromisión” del gobierno de los Estados Unidos. Llevaron carteles y pancartas confeccionados en el interior de la legación, donde ellos duermen desde el 10 de abril y allí consumen sus alimentos.
Las autoridades locales les dirigieron una enérgica advertencia para que pongan fin a la “protesta”.
El mismo jueves, el enviado de Estados Unidos a Venezuela, Elliott Abrams, afirmó que los manifestantes están «claramente infringiendo la ley», y que tendrán que marcharse porque “éste es un territorio soberano de Venezuela”. También dijo que la decisión de hacerse cargo del edificio seguramente la tomará en breve el embajador venezolano en Washington, Carlos Vecchio, nombrado por Guaidó y la Asamblea Nacional.
Maduro cerró la embajada en enero después de que Estados Unidos reconoció al líder de la oposición venezolana Juan Guaidó como presidente interino. Estados Unidos y otros 50 países –varios de ellos de América Latina-, consideran ilegítima la reelección de Maduro el año pasado.
Los activistas del grupo llamado Codepink acusan a Estados Unidos de intentar organizar un golpe de Estado en Venezuela, comparándolo con lo que sucedió con el gobierno izquierdista de Salvador Allende, en Chile.
Con Guaidó
Mientras tanto, los partidarios de Guaidó no se han quedado con los brazos cruzados en su campaña contra el régimen dictatorial de Maduro.
Se conoció que ellos están organizando una concentración ante el monumento al Libertador venezolano Simón Bolívar –cercano a la sede de la OEA-, para exteriorizar su respaldo a Guaidó y sus llamados a la libertad y la democracia en su país, según reportó el periodista Pedro Correa Bueno en las redes sociales.
EMBAJADOR OPOSITOR DIRIGE DISCURSO EN OEA
• Gustavo Tarre, emisario opositor a Nicolás Maduro se dirigió el martes 23 a la Organización de Estados Americanos (OEA) desde el escaño correspondiente a Venezuela por primera vez en dos décadas.
• Tarre pronunció un discurso durante una sesión celebrada por el Consejo Permanente.
• Reconocido como embajador con el voto a favor de 18 países, Tarre dijo que planea gestionar el reingreso de Venezuela al sistema interamericano de derechos humanos y buscará apoyo técnico para la celebración de elecciones presidenciales.