Bowser declara ante el Congreso sobre criminalidad y autonomía del Distrito

La alcaldesa de Washington, D.C., Muriel Bowser, defendió este jueves sus medidas de seguridad ante legisladores del Congreso, en medio del segundo mes del operativo policial impulsado por el presidente Donald Trump y mientras el Capitolio avanza en nuevas restricciones a la autoridad local.

Bowser fue convocada por el Comité de Supervisión y Reforma de la Cámara de Representantes para responder a inquietudes sobre la situación de la violencia en la capital. El mes pasado, Trump firmó una orden de emergencia que colocó a la policía de la ciudad bajo control federal y desplegó refuerzos de agencias de seguridad. Aunque dicha orden venció a comienzos de este mes, las agencias federales y la Guardia Nacional todavía mantienen presencia activa en el Distrito.

Durante su intervención, Bowser enumeró avances en la disminución de delitos, admitiendo que la intervención federal contribuyó a reforzar esos resultados.

“Un crimen ya es demasiado”, señaló Bowser. “Pero las cifras muestran que vamos por buen camino”.

La alcaldesa lidera la ciudad en un momento en el que la autonomía del Distrito enfrenta cuestionamientos sin precedentes desde la aprobación de la Ley de Autogobierno de 1973, que otorgó cierto nivel de autogestión. Aun así, el gobierno federal conserva amplios poderes, entre ellos la aprobación del presupuesto y de la legislación aprobada por el Concejo de D.C.

El presidente del comité, James Comer, criticó con dureza a Bowser y a otros funcionarios locales por el incremento de crímenes, y abrió la sesión citando varios hechos recientes, muchos de ellos relacionados con empleados actuales o pasados del Congreso, incluido el asesinato del pasante legislativo Eric Tarpinian-Jachym.

“Las elevadas tasas de criminalidad se explican principalmente por un alarmante aumento de delitos cometidos por menores de edad, alentados por políticas sumamente progresistas y permisivas frente al crimen, promovidas por el Concejo de D.C. y respaldadas por el Fiscal General”, afirmó Comer.

Asimismo, mencionó cambios legales que eliminaron la obligatoriedad de sentencias mínimas en la mayoría de los delitos, así como nuevas limitaciones que impiden a los agentes policiales perseguir a sospechosos.

“Los policías no pueden ejercer plenamente sus funciones, lo que ha provocado niveles históricos de baja moral, dificultades de retención y problemas de reclutamiento en el Departamento de Policía Metropolitana”, agregó. “Estas medidas transmiten a los delincuentes —en especial a los jóvenes— la idea de que pueden delinquir en el Distrito sin enfrentar consecuencias”.

Pie de foto:
La alcaldesa Muriel Bowser, rinde testimonio ante el Comité de Supervisión de la Cámara el 18 de septiembre de 2025.