Quién es el padre de Britney Spears?
James Parnell Spears lleva más de 10 años controlando el patrimonio de la «princesa del pop». ¿Qué se sabe sobre él y cuánto dinero ha obtenido con la tutela de su hija?
Pese a que lleva años fuera de los escenarios y sin sacar un disco, el foco mediático apunta estos días con fuerza a Britney Spears.
La controversia en torno a la tutela legal que su padre ejerce sobre ella desde hace 13 años parece no tener fin.
Los fans de la estrella del pop de 39 años reclaman que debe ser «liberada», pero la versión oficial dice que se trata de una medida de «protección».
Desde 2008, James Parnell Spears maneja las finanzas de su hija junto a una firma de gestión de patrimonios, Bessemer Trust, que también controla otros aspectos privados de su vida y que este jueves, en un nuevo desarrollo de los acontecimientos, pidió renunciar a la tutela.
La renuncia de la empresa se produce días después de unas explosivas declaraciones de Britney Spears en una audiencia pública de Los Ángeles, en las que aseguró que la tutela que «controla su vida» es «abusiva».
Sin embargo, la ley sigue de parte del padre de Britney. Esta semana una sentencia judicial denegó la solicitud de la cantante para que su padre dejara de ser su tutor legal.
¿Pero quién es Jamie Spears y cómo se convirtió en la persona que controla todo el patrimonio de Britney?
«Me salvó la vida»
En 1998, Britney Spears saltó a la fama. Su éxito «Baby One More Time» dio vuelta al mundo. Los medios la nombraron «princesa del pop».
Los éxitos se sucedieron y en 2002 fue nombrada la celebridad «más poderosa de Hollywood» por la revista Forbes.
Ese fue también el año en que sus padres, Jamie y Lynne, se divorciaron tras 27 años de matrimonio.
Pero Jamie, que ahora tiene 68 años, permaneció en la vida de Britney mucho después de su separación de Lynne.
De hecho, a partir de febrero de 2008, desempeñaría un papel crucial, como su tutor legal.
Britney tenía 27 años y los colapsos nerviosos que había sufrido en público evidenciaron sus problemas de salud mental. Los informes médicos dicen que trató de suicidarse y que tuvo que ser trasladada a un hospital psiquiátrico.
Jamie Spears pasó a convertirse en su agente, gerente y cuidador (hasta el año 2019). Y en el administrador de todas sus finanzas (hasta la actualidad).
«Mi padre me salvó la vida. Probablemente no estaría aquí si no fuera por él«, declaró en septiembre de 2008.
Años después, la cantante asegura que su padre debería estar en la cárcel y que ha disfrutando haciéndole sufrir.
Un patrimonio multimillonario
De manera ininterrumpida durante todos estos años, Jamie Spears se ha encargado de decidir cómo, cuándo y dónde es gastado el dinero de su hija, cuyo patrimonio está valorado actualmente en unos US$60 millones.
No hay muchos datos sobre la vida laboral de Jamie Spears antes de asumir la tutela de su hija.
Según las memorias de su exesposa Lynne Spears, el padre de Britney era soldador de oficio y pasó algunos meses trabajando en refinerías de petróleo y obras de construcción, pero no ganaba mucho dinero: «Debíamos más de lo que ganábamos», escribió la madre de Britney.
La fama de su hija resolvió todos sus problemas financieros. Y también la tutela, que se convirtió para Jamie Spears en un trabajo a tiempo completo, con sueldo incluido.
En total, ha recaudado al menos US$5 millones en concepto de honorarios legales, según Forbes.
De acuerdo con la revista económica, la cual habría tenido acceso a documentos judiciales, Jamie Spears recibe desde febrero de 2009 una cantidad mensual de US$16.000.
Además, un informe del New York Times señaló que recaudó parte de los ingresos por giras de la cantante y que obtuvo comisiones por la venta de entradas, recabando al menos US$500.000.
En 13 años, Britney Spears no ha tenido ningún control sobre el dinero que genera su trabajo.
«Una farsa»
En agosto de 2020, Britney comenzó un proceso para evitar que su padre siguiera manejando sus finanzas.
Jamie Spears dijo entonces que la tutela de Britney «no es asunto de nadie más» y que el movimiento #FreeBritney («Liberen a Britney, impulsado por los fans de la cantante), «es una farsa».»Todos estos teóricos de la conspiración no saben nada. El mundo no tiene ni idea«, le dijo a la publicación Page Six.
«Es un asunto de la Corte de California decidir qué es lo mejor para mi hija. No es asunto de nadie más».
En noviembre de 2020, un juez acordó que la tutela permanecería vigente. Y esta semana una jueza ratificó el papel de Jamie como tutor legal de la artista.
La polémica continúa.
El periodista de la BBC Mobeen Azhar muestra en el documental de BBC Three The battle for Britney («La batalla por Britney») documentos de la tutela que dicen que la cantante tiene demencia (o está siendo tratada por ello).
«Solo caben dos opciones: que Britney efectivamente tenga demencia […] o una realidad más siniestra: que los tutores sugirieron que la tiene para promover la tutela. Si ese es el caso, entonces es aterrador», dijo el periodista.
Jamie Spears no ha emitido comentarios sobre esas acusaciones, pero ha dicho en el pasado que trabaja por el mejor interés de su hija y que está dedicado a «protegerla».
En cambio, el abogado de Britney, Samuel Ingham, ha dicho que la cantante «tiene miedo de su padre»