Se popularizan las bodas con vestimentas especiales
Cada vez más son más las parejas en Estados Unidos que dejan de lado la tradición a la hora de elegir la vestimenta que deben llevar los invitados a una boda, lo que en ocasiones les causa desconcierto a éstos.
Maggie Long, de 34 años, recientemente fue a la boda de una amiga cercana en un bar discreto de Denver. ¿La vestimenta sugerida? “Semiformal para un tugurio”.
“Me encantan las temáticas”, comentó Long, que vive en Nueva York. «Es divertido que la gente ya no tome las bodas tan en serio, pero no tenía ni idea de lo que eso significaba”.
Tras intercambiar opiniones durante meses con el maestro de ceremonias, que también es su amigo, Long le planteó su idea de vestimenta —un vestido muy corto de tirantes— a la novia. La novia consideró que era bastante similar a “un disfraz de las Kardashian”. Finalmente Long se decidió por un vestido ceñido de lamé dorado de Norma Kamali, y la pasó muy bien.
“Había muchos overoles clásicos. Una de nuestras amigas se vistió como de la década de 1960, con botas altas y un peinado esponjado. Había muchas lentejuelas”, comentó Long.
Algunas parejas han empezado a ofrecer tableros de inspiración como una forma de orientar a sus invitados, incluidos a los de mayor edad. En la boda del bar pequeño y nada lujoso, Long dijo que había muchos invitados de edad avanzada que acogieron la idea. Uno llevaba puesta una camisa desteñida de arcoíris, al estilo de los Grateful Dead.
Otros invitados han sido invitados a bodas con una vestimenta “tropical y formal”, “casual elegante” y “extravagante para fiesta en jardín”.
De cara a la agitada temporada de bodas y otros eventos especiales del verano, Indya Wright, de Washington D.C., ya está harta.
Recientemente tuiteó: «Estos códigos de vestimenta para eventos new age son la pesadilla de mi existencia. ¿Qué ha pasado con ‘informal’, ‘cóctel’ y ‘formal’? Ahora tengo que buscar en Google ‘atuendo formal de fiesta renacentista para después de las 5’ con el fin de dilucidar si quieres que vaya estilo Gran Gatsby o de Rey Arturo y los Caballeros de la Mesa Redonda”.
Wright, de 35 años, sigue frustrada. La boda de una compañera de la universidad especificaba un código de vestimenta «casual elegante, pero no demasiado elegante”.
Renée Strauss, cofundadora y directora general de la empresa Wedaways de organización de bodas en sitios lejanos, de Beverly Hills, California, dijo que los códigos de vestimenta extravagantes se deben a que las parejas procuran que sus bodas sean personalizadas y únicas.
“La clave es asegurarse de que hay comunicación detrás del código de vestimenta. No hay que confundir a los invitados”, explicó.
Cuando su compañía crea los sitios web de bodas para sus clientes, incluye descripciones para códigos de vestimenta como “chic de región vinícola”, pidiendo a las parejas que ofrecen una amplia serie de opciones para que la gente se exprese a sí misma. “Formal tropical”, por ejemplo, podría referirse a vestidos largos y vaporosos en vivos colores veraniegos y trajes de lino con corbatas alegres.
“La mayoría de los invitados se divierten mucho con eso”, comentó Strauss.
Rikki Gotthelf, de 32 años, de Los Ángeles, asistió a una boda recientemente y tiene tres más este año. Fue dama para la boda con temática de “vaquera espacial disco” de una de sus amigas, que transportó a sus invitados a un pueblo fantasma abandonado cerca de Austin, Texas.
«Teníamos esos vestidos de la pradera intergalácticos brillantes de Batsheva. El mío era iridiscente”, dijo Gotthelf. “Otra boda a la que fui era ‘formal funky’”.
Para orientarse, Gotthelf recurrió a Sophie Strauss, que se define como “estilista para gente común y corriente”. Strauss sugiere ponerse en contacto con la pareja si no ha quedado claro cómo hay que ir vestido.
“No se ofenderán”, señaló. “Les importa lo suficiente el aspecto de todo el mundo como para haber establecido un código de vestimenta estrafalario”.
Uno de sus clientes va a celebrar una boda con código de vestimenta “formal para festival de música”.
“Aclaró con la pareja que es más Woodstock y menos Burning Man (un evento anual que se lleva a cabo en Nevada). Es bueno saberlo”, dijo la estilista.
¿Cuál es la diferencia? Vestidos vaporosos tipo hippie, pantalones acampanados, túnicas, prendas desteñidas, grandes gafas de sol redondas y cintas tejidas para la cabeza para la primera. Para la segunda, algo más como botas de combate, pedrería, pintura corporal y gafas. Su clienta se decidió por un traje de lino en tonos neutros con uno o dos collares de cuentas vintage.
Imploró a los invitados que se examinaban los códigos de vestimenta extravagantes que recordaran: “No es un disfraz. A menos, claro, que sea literalmente una fiesta de disfraces”.
Unos pequeños ajustes podrían ser más que suficiente, como ponerse un traje normal, pero cambiar la camisa por una que sea más acorde a la temática. James Berger, de 32 años, en Las Vegas, fue uno de los invitados a los que se pidió que expresaran su espíritu interior. Llevaba una corbata de moño con puntos de varios colores y un traje formal que le hacía sentirse “ligeramente fuera de lugar” en medio de un mar de colores vibrantes.
Strauss, la estilista, se enfrenta regularmente a este problema entre sus clientes.
“Tuve una cliente que tenía que ir a un evento con temática de ‘rancho lujoso’ hace unos meses y estaba pensando en comprar todo su atuendo, de pies a cabeza”, comentó. “Pero conjuntar unas botas vaqueras con un vestido veraniego o cambiar una corbata por un corbatín funciona. Y si realmente quieres hacerlo muy bien, podrías añadir un sombrero vaquero. No necesitas vestirte como Orville Peck para cumplir con la temática, aunque si ese es tu estilo, ¡por Dios hazlo!”.
A menudo hay un significado sentimental detrás de las temáticas de las bodas. Madison Smith, de 32 años, se casará en mayo de 2024 y el código de vestimenta para su boda es “elegante y glamoroso para el atardecer”. La boda se celebrará en el salón Bonnet Island Estate de Long Beach Island, Nueva Jersey.
“Es en honor a mi fallecido abuelo”, dijo sobre la temática. “Lo que más le gustaba eran los atardeceres del sitio donde me voy a casar”.
¿Lo que se imagina? Vestidos color atardecer de naranjas, amarillos, morados, azules y rosas con divertidos accesorios, y esmóquines con moños y pañuelos de bolsillo de los mismos colores.
Smith, de Arlington, Virginia, no ha dejado con la duda a sus invitados. Trabaja en Pinterest y ya les ha enviado imágenes para que se inspiren. Los invitados a su despedida de soltera tienen su propio tablero de inspiración para lograr el código de vestimenta de “nido de amor elegante”.
“No tienen precedentes de un código de vestimenta inusual cuando una pareja pide algo que no sea elegante, formal, cóctel o atuendo informal. Cuando se recibe una invitación en la que se lee ‘chic festivo estilo Hudson Valley’ o ‘inconformista tropical’, sin duda puede presagiar más preguntas que menos para quienes están acostumbrados a temáticas más tradicionales”, señaló Amy Shey Jacobs, fundadora de Chandelier Events en Nueva York.
“Súper chic». “Fiesta de jardín gay”. “Elegante y fabuloso”. “Cóctel colorido”. “Brillo y resplandor”. “Listo para la alfombra roja”. Jove Meyer, propietario y director creativo de una empresa homónima de organización de eventos en Brooklyn, ha manejado todos los códigos de vestimenta anteriores.
“Por mucho que ame un código de vestimenta divertido y único, siempre le sugiero a las parejas que especifiquen claramente qué quieren con una descripción de una frase o dos para que no haya ninguna duda”, comentó.
Brittny Drye, editora en jefe de la revista para bodas Love Inc, dijo que los invitados no deberían ser reacios a interrogar a la pareja nupcial sobre un código de vestimenta desconcertante.
“Nunca queremos bombardear a la pareja”, comentó, “pero cuando piden a sus invitados que se atengan a un código de vestimenta no tradicional, están apuntándose para que les hagan preguntas”.