Claudio Reyna deja dirección deportiva de Austin
Claudio Reyna dejó su puesto de director deportivo del Austin el jueves, en lo que constituye el cambio más reciente en la estructura del fútbol estadounidense tras el pleito de la familia del exjugador con el seleccionador Gregg Berhalter.
Reyna, de 49 años, se desempeñará ahora como asesor técnico. El excapitán de la selección estadounidense había sido director deportivo del Austin desde 2019 y durante sus primeras dos temporadas en la MLS —2021, y 22.
Josh Wolff, entrenador del Austin, será el jefe de fútbol en forma interina, informó el club. Sean Rubio, director de personal deportivo, se desempeñará como director deportivo provisional.
El mismo jueves, la Federación Estadounidense de Fútbol informó que su director deportivo Earnie Stewart había renunciado para aceptar un puesto con el PSV Eindhoven. Dejó su cargo también el gerente general Brian McBride.
Berhalter, cuyo contrato expiró el 31 de diciembre, es sujeto de una investigación por parte de un despacho de abogados, contratado por la Federación, a raíz de un acto de violencia contra su pareja, supuestamente cometido en 1991.
Anthony Hudson ha tomado las riendas de la selección en forma interina. La Federación confió en que Hudson permanezca como técnico al menos hasta el tercer trimestre.
“Agradecemos las contribuciones de Claudio con nuestro club y nuestra comunidad”, dijo el dueño mayoritario y director general del Austin, Anthony Precourt, en un comunicado. “Claudio ha estado comprometido con la causa de construir un club que inspire a Austin, y seguirá en una posición para contribuir con nuestra organización”.
Reyna se dijo ansioso por “un ritmo de trabajo menos desgastante”, que le permita todavía ayudar “al desarrollo del club”.
Tras la eliminación de Estados Unidos en los octavos de final de la Copa del Mundo, el 3 de diciembre ante Holanda, Berhalter dijo durante una conferencia en Nueva York que estuvo a punto de enviar a casa a un jugador convocado a Qatar, quien no se esforzaba en los entrenamientos.
Se supo que ese jugador era Gio Reyna, de 20 años e hijo de Claudio y de la otrora seleccionada Danielle Egan Reyna.
El matrimonio Reyna se quejó ante Stewart y McBride de que su hijo no había tenido tiempo suficiente en la cancha durante el Mundial, donde apenas ingresó un par de veces como sustituto.
Danielle Reyna notificó a Stewart del incidente de 1991, en el que Berhalter habría pateado a Rosalind Santana, con quien después se casó. Santana era compañera de curto de Danielle en la universidad.
La Federación contrató al despacho Alston & Bird para investigar el caso.