‘Coco’ y su efecto en el Día de los Muertos
Eric Klein
Especial para WH
Como viajero y residente de México, busco experiencias únicas que me permitan conocer más y más sobre las costumbres mexicanas. Día de muertos resultó una ocasión perfecta para esto. Esta celebración que generalmente se lleva a cabo el 1 y 2 de noviembre, es una fusión entre las culturas Maya y Española Católica, que refleja exactamente la identidad mexicana. La ritualizada remembranza ha ganado tanta fama internacional, que viajeros de alrededor del mundo se reúnen para observar a los mexicanos celebrar la vida y memorias de aquellos seres que han perdido.
En 2017, Disney estrenó «Coco», una película con la temática del día de los muertos, ganando dos premios Óscar. La popularidad de la película ha incrementado la popularidad de la festividad en la cual se basa. Yo experimenté esto de primera mano cuando traté de reservar un hotel en Pátzcuaro, Michoacán, conocido como el corazón de las celebraciones. Todos los cuartos de hotel, camas de hostal, y AirBnBs habían sido reservados con meses de anticipación. El resto del año, Pátzcuaro es un pueblo a la orilla de un tranquilo lago, con una población de aproximadamente 80 mil personas. Pero cuando yo llegué el 1 de noviembre, las ya de por sí angostas calles estaban repletas de tráfico, por lo que no me quedó más remedio que ir a un campamento a las afueras.
Conforme descendía la noche, me puse en contacto con Leticia Alcalá, una empleada de hotel y guía de turistas local. Ella explicó que el Día de los Muertos siempre ha sido un gran evento en Pátzcuaro, pero que desde que «Coco» salió, el volumen de turistas tanto de nacionales como de extranjeros ha incrementado. Inclusive, nuestros recorridos por los cementerios locales se duplicaron en tamaño en unas horas desde nuestra salida. Metimos a 25 personas en camionetas de 20 pasajeros y nos aventuramos entre el pesado tráfico. Nuestro grupo incluía mexicanos, japoneses, brasileños, argentinos, londinenses, y estadounidenses, uno de los cuales dijo, medio bromeando, «¡esta será como la versión en vivo de ‘Coco’!»
Al acercarnos al pueblito de Tzintzuntzan, la fila de carros, camionetas, y camiones de turistas fue disminuyendo su velocidad hasta detenerse por completo, por lo que el resto del trayecto lo completamos a pie. Los cementerios estaban repletos de visitantes, todos tomando fotos de los sombríos familiares vigilando las tumbas de sus parientes. Me sorprendió la cordialidad entre los dolientes locales y los turistas. A pesar de la oscuridad y de los estrechos caminos, todos evitaban caminar sobre las tumbas para acortar camino, y había casi cero basura en el piso. Algunos visitantes, más respetuosos inclusive, pedían permiso antes de tomar una foto a las familias.
«Creo que es bueno que el Día de Muertos se esté volviendo más popular», Leticia me dijo, «yo sé que puede ser a causa de la película pero eso significa que los mexicanos de todo el país, no solo de aquí de Michoacán, tienen más interés en sus propias costumbres. Eso es bueno».
(Eric Klein se graduó en el año 2008 en la escuela secundaria Einstein High School, en Kensington, MD. Obtuvo un título en Mercadeo en la Universidad Appalachian State University, en Boone, NC.)