La ley sobre «influencia extranjera» entra en vigor en Georgia
El presidente del Parlamento georgiano, Shalva Papuashvili, firmó este lunes la ley sobre «influencia extranjera», lo que permite que la norma entre en vigor pese a las masivas manifestaciones de repulsa que desató en esta exrepública soviética del Cáucaso.
«Hoy firmé la ley sobre la transparencia de la influencia extranjera, que tiene como objetivo principal reforzar la solidez de los sistemas sociales, económicos y políticos georgianos», declaró Papuashvili en un comunicado.
La normativa, inspirada de una medida represiva rusa, estipula que las oenegés y organizaciones de prensa que reciban más de 20% de su financiamiento del exterior se registren como entidades que sirven los «intereses de una potencia extranjera».
Fue adoptada definitivamente por el Parlamento el 28 de mayo, cuando los diputados del gobernante Sueño georgiano, que disponen de una mayoría en el hemiciclo, lograron tumbar el veto interpuesto por la presidenta prooccidental Salomé Zurabishvili.
Tanto la Unión Europea como Estados Unidos han denunciado el texto, que según ellos, alejan al país de su objetivo de adherirse al bloque europeo de 27 Estados miembros.
El texto desencadenó protestas masivas en este país de 3,7 millones de habitantes y provocó acciones de protestas frente al Parlamento durante casi dos meses.
Varios medios y oenegés han anunciado su intención de seguir impugnando el texto ante el Tribunal Constitucional de Georgia, aunque este último está también bajo control del partido Sueño georgiano, y la Corte Europea de Derechos Humanos.
Sueño georgiano apoya la adhesión a la UE, pero afirma querer una mayor «transparencia» del financiamiento de medios y oenegés. Desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022, la formación ha multiplicado las decisiones que lo acercan a Moscú.