Hacen bajar a migrantes frente a la casa de vicepresidenta Harris

Sin previo aviso, dos autobuses llenos de migrantes procedentes de la frontera entre Estados Unidos y México fueron descargados el jueves por la mañana cerca de la casa de la vicepresidenta Kamala Harris, en un barrio residencial de Washington, DC como parte de la encarnizada batalla política en torno a las políticas de inmigración de la actual administración.

El gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, ha estado trasladando migrantes fuera de Texas hacia ciudades con alcaldes demócratas este año, como parte de una estrategia política antiinmigrante. Afirma que están llegando demasiados migrantes a través de la frontera de su estado.

Al centenar de migrantes se les encontró parados y desorientados en la esquina de la Massachussets Avenue, durante la hora de mayor tránsito vehicular de la mañana. Nadie estaba para recibirlos y darles ayuda, como les habían dicho.

“Creo que esto está muy mal”, comentó Carmen Carrera, moviendo la cabeza. Ella es una de las voluntarias de DC que han estado trabajando para ayudar a los migrantes a medida que llegan. “Estos son seres humanos y simplemente los han dejado sin que nadie les dé la bienvenida”, dijo.

El centenar de hombres y mujeres habían sido dejados al amanecer frente a la sede del Observatorio Naval de Estados Unidos, algunos con bolsas de plástico transparente en las que llevaban las pertenencias que trajeron al cruzar la frontera.

Los voluntarios, mientras tanto, esperaban que los inmigrantes se presentaran en Union Station, como sucedió en anteriores envíos.

“Todos tuvimos que subirnos a nuestros autos y venir aquí”, dijo Carrera.

De inmediato, los voluntarios reunieron a los migrantes y llamaron a varios taxis Uber para llevarlos a un lugar donde pudieran comer algo, dijo Carrera.

Los gobernadores de Arizona, Doug Ducey, y de Florida, Ron DeSantis, también adoptaron la política puesta en marcha por Texas e ideada primero por el expresidente Donald Trump.

Abbott tuiteó que había enviado los autobuses que llegaron el jueves a la capital estadounidense: “Estamos enviando inmigrantes a su patio trasero para pedirle al gobierno que haga su trabajo y refuerce la frontera”.

DeSantis también envió el miércoles dos aviones con migrantes a la isla atlántica de Martha’s Vineyard. La semana pasada, Abbott envió a unos 75 inmigrantes a Chicago.