Biden corteja el voto latino con medidas educativas y migratorias
El presidente estadounidense, Joe Biden, anunció este miércoles medidas educativas y migratorias para cortejar el voto latino, crucial en las elecciones de noviembre.
Más de 30 millones de latinos pueden votar en estos comicios, una cifra superior a la de afroestadounidenses, estima el Pew Research Center.
Los latinos han votado mayoritariamente por los demócratas en el pasado, pero no es un voto monolítico y la brecha sigue estrechándose con los republicanos.
El equipo de Biden lo sabe y ha anunciado este miércoles varias acciones destinadas a este electorado, que se suman a una campaña publicitaria agresiva lanzada hace meses en inglés, español y spanglish.
La Casa Blanca anunció que se incluirá a los dreamers o «soñadores», es decir a los migrantes que llegaron de niños a Estados Unidos, en el programa federal TRIO que provee apoyo a estudiantes de bajos ingresos o con discapacidad.
Esto beneficiará a «aproximadamente 50.000 estudiantes más» cada año y permitirá que «miles más» vayan a la universidad, informa en un comunicado emitido horas antes de un mitin previsto en Las Vegas (oeste) que Biden canceló al dar positivo por covid-19.
Biden ha decepcionado a muchos latinos al incumplir su promesa de conceder la ciudadanía a millones de personas que viven ilegalmente en Estados Unidos desde hace años.
Y aunque los latinos están muy preocupados por el poder adquisitivo, según las encuestas, también se interesan por la crisis migratoria contra la que Biden, presionado por los republicanos que le acusan de ineficacia, ha tomado medidas duras en las últimas semanas.
En junio restringió la entrada de migrantes por la frontera con México cuando haya más de 2.500 cruces irregulares en el promedio de siete días.
Desde entonces, para compensarlo, ha anunciado una batería de medidas.
El Departamento de Justicia pondrá abogados voluntarios a disposición de tribunales migratorios para ayudar a quienes no tienen representación legal en Hyattsville (Maryland), Nueva York y Atlanta, informa el comunicado. Este servicio ya se ofrecía en San Francisco, Nueva Orleans y Chicago.
Además el Departamento de Seguridad Interior llevará «asistencia relacionada con la inmigración a las comunidades locales, incluidas las áreas rurales y desatendidas», añade. Se trata de apoyo para las entrevistas de naturalización e información sobre los procesos migratorios, entre otros.
Semanas atrás Biden aceleró la concesión de visas de trabajo a los graduados en centros de educación superior estadounidenses, lo que beneficia a los «soñadores».
También decidió simplificar el proceso para que los migrantes casados con estadounidenses, además de sus hijos, puedan obtener el permiso de residencia, la famosa tarjeta verde, sin tener que salir del país para solicitarla si llevan al menos diez años viviendo en Estados Unidos.
Podrán solicitarlo a partir del 19 de agosto, anunció este miércoles la Casa Blanca.