10 pares de gemelos se gradúan en la misma clase
Muchos estudiantes de último año de secundaria se gradúan este mes, pero una escuela secundaria en el condado de Prince George, Maryland, está graduando la friolera de 10 pares de gemelos en una sola clase.
De los aproximadamente 600 graduados de la Preparatoria Eleanor Roosevelt, 20 son gemelos o mellizos. La excepción estadística fue reconocida por los administradores y todos se pusieron de pie ante la multitud.
«Es una locura total que hayamos crecido con todos estos niños y ni siquiera supiéramos que la mitad de ellos eran gemelos», dijo Andrew Beckman, un gemelo fraterno que se gradúa.
Niles y Victoria Brown formaban parte de la pareja de gemelos que desfilaron por el escenario del Xfinity Center de la Universidad de Maryland. Su condición de gemelos los llevó a una competencia dramática en cuanto a calificaciones y reconocimientos, comentaron. Ambos se graduaron como miembros de la Sociedad Nacional de Honores.
“Te hace mantenerte en la cima de tu juego”, dijo Niles.
Pero como son gemelos fraternos, no idénticos, muchos ni siquiera sabían que estaban emparentados.
“Durante cuatro años la gente ni siquiera sabía que éramos hermanos, hasta hoy”, dijo Victoria.
Andrew y Alena Beckman compitieron entre sí, pero también se apoyaron mutuamente durante su carrera en la escuela secundaria.
“Competimos entre nosotros, pero siento que también nos ayudamos mutuamente: yo soy muy mala en física, él es muy bueno. Él me ayudó con física. Soy mejor escribiendo”, dijo Alena.
“Ella me ayudaba a escribir mis ensayos y nos equilibrábamos mutuamente”, dijo Andrew.
Algunas de las gemelas irán a la misma universidad. Taylor y María Gómez asistirán a la Universidad de Pittsburgh en otoño.
«Es bueno porque vamos a ir fuera del estado y no conocemos a nadie de nuestra escuela que vaya allí, así que al menos nos conoceremos antes de la situación», dijo María.
Otros se separarán por primera vez en sus 18 años.
Andrew irá a la Universidad Estatal de Carolina del Norte y Alena asistirá a la Universidad de Vanderbilt.
“Es estresante, sí, hay muchas lágrimas”, dijo Andrew.
«Creo que nos llamaremos mucho. Lo pensaremos de forma más positiva, pero sin duda es un gran cambio», dijo Alena.
