Sobrevivientes de Chapecoense visitan sitio de tragedia

Washington Hispanic
AP

l club Chapecoense tuvo un emotivo regreso el martes a la ciudad colombiana donde murió la mayoría de su plantel en un accidente aéreo a fines del año pasado.

Una delegación del club brasileño, incluyendo tres futbolistas que sobrevivieron al accidente, visitó La Unión, la localidad vecina al cerro El Gordo, donde el avión que les transportaba se estrelló el 28 de noviembre. En el accidente murieron 71 de los 77 tripulantes de la aeronave, incluyendo 19 jugadores.

El cerro es conocido desde mediados de diciembre con el nombre del club, por decisión de las autoridades de La Unión, localidad ubicada a unos 57 kilómetros de Medellín.

La Unión, con una población de 20.000 habitantes, se paralizó el martes y aclamó a cuatro de los seis sobrevivientes.

Los jugadores Jackson Follmann, Alan Ruschel y Helio Neto y el narrador deportivo Rafael Henzel quienes sobrevivieron, fueron declarados hijos adoptivos de La Unión. El técnico aeronáutico Erwin Tumiri y la asistente de vuelo Ximena Suárez, ambos bolivianos, también salieron con vida.

“Tenía que ver esto por mí mismo para creer lo que ocurrió”, manifestó Follman, quien perdió parte de una pierna en el accidente y miraba fijamente el lugar bajo la lluvia. “Fue un milagro de Dios”.
Las fotografías de los jugadores que perecieron y flores adornaron el parque principal de La Unión.

«Estamos contigo (el club)», decía una de las pancartas con los escudos de Atlético Nacional y Chapecoense. El poblado se vistió de verde, el color de ambos clubes.

Alberto Pinto, padrastro del piloto de Lamia, Miguel Quiroga, llegó procedente de Bolivia y acompaño a la delegación.

«Vine a hacer parte de los eventos y prometí llevarle imágenes, fotos del lugar y objetos a mi esposa, es lo único que nos queda», declaró Pinto en la edición digital del diario El Colombiano de Medellín.

La fundación Corporación Binacional de Hermandad La Unión Chapecó entregó al club más de 150 objetos rescatados entre los restos del avión para hacerlos llegar a los familiares de las víctimas.

La comitiva del club brasileño visitó previamente los hospitales donde fueron atendidos los sobrevivientes.

«No hay nada mejor que volver aquí para agradecer a esta gente», dijo el zaguero Ruschel, quien se recupera de lesiones de la columna y se prepara para volver a la cancha.

Chapecoense tuvo un recibimiento con todos los honores el lunes cuando llegó a Medellín, donde el miércoles enfrentará a Atlético Nacional en el partido de vuelta por la Recopa Sudamericana. El club brasileño ganó el encuentro de ida por 2-1 en su estadio.

El avión de Chapecoense se estrelló en la ladera del cerro cuando llegaba a Colombia para enfrentar a Nacional por la final de la Copa Sudamericana. La Conmebol concedió al equipo brasileño el título de la Sudamericana, lo que le otorgó el derecho a disputar la Recopa ante Nacional, actual monarca de la Copa Libertadores.

Los tres jugadores que sobrevivieron al accidente _Ruschel, Follman y el zaguero Hélio Zampier Neto_ acudirán al partido como espectadores, junto a Henzel.

Se espera que los rescatistas que trabajaron en el accidente les entreguen algunos artefactos que recuperaron en la escena.
Al visitar el hospital el martes, los sobrevivientes se abrazaron llorosos con el personal que los atendió.

“Para nosotros y para el hospital es muy emotivo tenerlos de vuelta”, dijo el doctor Ferney Alexander, jefe médico del Hospital San Vicente. “Están aquí por el trabajo que hicimos en noviembre y diciembre”.

«Feliz y agradecido por estar vivo, caminar y estar entrenando de nuevo con el equipo. Con la sensación y la tristeza de haber perdido muchos amigos, pero con el agradecimiento también por la solidaridad de la gente de Colombia y de nuestra ciudad Chapecó», declaró Ruschel al diario El Colombiano de Medellín.

Antes de viajar a Colombia, Chapecoense ganó por segundo año consecutivo el campeonato estatal de Santa Catarina.

«Nada podrá borrar lo que sucedió, pero estamos trabajando para que los hinchas se sientan orgullosos, para que nosotros llenemos de gloria a este equipo, para que nuestros amigos sonrían desde el lugar donde estén, para que su legado permanezca», concluyó Ruschel.

Vagner Mancini relevó en el banco al fenecido timonel Caio Junior y reconoció que ha sido difícil la tarea de rehacer el plantel.

«Es algo inaudito reconstruir un equipo y ganar un título en cuatro meses», señaló.