Hijo de salvadoreños superó el lunes la marca de 355 días en órbita

El astronauta de origen salvadoreño Frank Rubio batió el récord de la misión más larga en órbita realizada por un estadounidense, al pasar más de 355 días a bordo de la Estación Espacial Internacional (ISS).

«En cierto modo, ha sido un reto increíble. Pero en otros aspectos, ha sido una bendición increíble», declaró Rubio el miércoles desde la ISS durante una charla con la NASA retransmitida en directo.

Tras batir el récord el lunes, Rubio dijo que ahora espera alcanzar los 365 días. «Creo que será un hito realmente bueno para nuestra nación», dijo.

Rubio, hijo de padres salvadoreños, nació en Los Ángeles, California, y vivió sus primeros años en El Salvador. Es médico de formación y piloto de helicóptero.

El anterior récord estadounidense lo estableció en 2022 Mark Vande, que pasó 355 días en el espacio. El récord mundial lo ostenta el cosmonauta ruso Valeri Poliakov, con 437 días.

Rubio tiene previsto regresar a la Tierra el 27 de septiembre. Habrá pasado 371 días en el espacio para entonces.

Cuando Rubio viajó a la ISS el año pasado en un cohete ruso Soyuz con dos cosmonautas, el plan era que permaneciera seis meses, que es la duración habitual de la misión.

Según el procedimiento habitual, ese cohete permaneció enganchado a la ISS como nave de escape de emergencia en caso necesario, y se suponía que traería de vuelta a casa a esos tres viajeros en diciembre. Pero el cohete sufrió una fuga, probablemente debida al impacto de un pequeño meteorito.

Así que la agencia espacial rusa Roscosmos devolvió el cohete a casa y envió otro sin tripulación a bordo.

El récord estadounidense de días en el espacio lo ostenta la ex astronauta Peggy Whitson, con 675 días, pero durante varias misiones.

Gran esfuerzo

En un video de presentación de la NASA en 2022, el astronauta de 47 años relató que el haber sido el hijo de una adolescente migrante que lo crió por su cuenta le enseñó el valor de la autosuperación y el esfuerzo: «Soy el resultado de muchos sacrificios y de grandes equipos». Su madre, Myrna Argueta, vive actualmente en El Salvador.

Ahora, casado con su esposa Débora y padre de cuatro hijos, Rubio recuerda cómo se unió al Ejército en el año 1998 con el objetivo de pagar sus estudios universitarios. Tras graduarse de la Academia Militar, obtuvo un doctorado en medicina de la Universidad de Servicios Uniformados de Ciencias de la Salud en 2010, tras lo cual fue proveedor ejecutivo médico y cirujano de vuelo en Redstone Arsenal, Alabama.

Pero en el año 2017 un impulso lo llevó a dar un paso más allá de su carrera militar, al intentar ingresar a la NASA para convertirse en astronauta: Rubio fue uno de los 12 seleccionados de entre nada menos que unos 18.000 aspirantes.