Los residentes de DC ahora pueden recibir la vacuna contra la COVID-19 sin receta médica
La legislación de emergencia firmada esta semana por la alcaldesa de DC, Muriel Bowser, autorizará a las farmacias autorizadas a administrar vacunas COVID-19 sin receta.
Este año, los cambios en las recomendaciones federales exigieron que quienes desearan vacunarse contra la COVID-19 obtuvieran previamente una receta médica, a menos que tuvieran 65 años o más o se consideraran de riesgo. El calendario de vacunación de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) incluye la vacuna contra la COVID-19 de 2024-2025, pero no la de 2025-2026, lo que deja las vacunas más recientes sujetas a la prescripción médica.
Esto ha provocado que varios estados recurran a implementar sus propias políticas para eliminar la necesidad de una receta médica, que no se requería en años anteriores desde la pandemia.
“DC ahora igualará a Maryland y Virginia, para que los residentes no tengan que viajar fuera del estado para poder acceder a la vacuna”, dijo la miembro del Consejo At-Large Christina Henderson, quien preside el Comité de Salud.
Fue su proyecto de ley el que fue aprobado 12-0 por el consejo y firmado por la alcaldesa Bowser.
Los virginianos elegibles ahora tienen más facilidad para vacunarse gracias a una orden emitida por el Departamento de Salud de Virginia hace dos semanas. El estado vecino de Maryland también protegerá el acceso a las vacunas para todos sus residentes ante la proximidad de la temporada de gripe.
“El Departamento de Seguros, Valores y Banca de DC ha exigido que todos los planes de seguro del Distrito sigan cubriendo todas las vacunas aprobadas a partir de diciembre pasado hasta 2026”, agregó Henderson.
A Henderson le preocupa que la administración actual no se centre en prácticas comprobadas y basadas en la salud.
«Realmente deseo que el gobierno federal vuelva a encaminarse en términos de seguir verdaderamente la ciencia, en lugar de estas asociaciones y no correlaciones que están viendo en las investigaciones», dijo.
Señaló el anuncio del presidente Donald Trump esta semana de que las mujeres embarazadas no deberían tomar Tylenol, ya que afirmó, sin ninguna evidencia científica que lo respalde, que existe una relación entre el acetaminofén y el autismo infantil. El fabricante de Tylenol, Kenvue, así como numerosos grupos científicos, refutaron de inmediato y enérgicamente dicha afirmación.