Se entrega a las autoridades exjefe de campaña de Trump

AP
Washington Hispanic

aul Manafort, exjefe de la campaña electoral del presidente estadounidense Donald Trump, se entregó a las autoridades el lunes acusado de cargos que incluyen conspirar contra Estados Unidos, lavado de dinero y otros.

Los cargos son los primeros derivados de la investigación que encabeza el fiscal especial Robert Mueller sobre lazos entre la campaña de Trump y Rusia. La imputación contra Manafort y su antiguo socio Rick Gates presentada en una corte federal en Washington los acusa de manejar decenas de millones de dólares en pagos a través de compañías y bancos extranjeros.

Manafort y Gates se entregaron a las autoridades federales y se espera comparezcan ante la corte más tarde el lunes para enfrentar los cargos.

La imputación detalla 12 cargos, incluyendo conspiración contra Estados Unidos, conspiración para lavar dinero, actuar como un agente extranjero no registrado y varios relacionados con no reportar cuentas bancarias en el extranjero. El documento dice que el dinero fue movido a través de cuentas bancarias ocultas en Chipre, San Vicente y las Granadinas y las Islas Seychelles. En total, más de 75 millones de dólares pasaron por esas cuentas. Manafort está acusado de lavar más de 18 millones.

Manafort, de 68 años, fue despedido como jefe de la campaña de Trump en agosto tras conocerse que había orquestado una operación encubierta de cabildeo en favor de intereses pro rusos en Ucrania. The Associated Press reportó que Manafort representó además a un millonario ruso hace un decenio con el interés de promover los intereses del presidente ruso Vladimir Putin.

La Casa Blanca no ha comentado al respecto.

El presidente Trump escribió el lunes en Twitter: “Lo lamento pero esto fue muchos años antes de que Paul Manafort fuera parte del a campaña de Trump. Pero ¿por qué la corrupta Hillaru y los demócratas no son el foco?”.

Y en otro tuit agregó: “Además, ¡NO HAY COLUSIÓN!”.

Mueller fue designado como fiscal especial en mayo para dirigir la investigación del Departamento de Justicia sobre si el Kremlin trabajó con asociados de la campaña de Trump para interferir con las elecciones presidenciales.

El nombramiento se produjo una semana después del despido de James Comey, que como director del FBI dirigía la investigación, y siguió además la decisión meses antes del secretario de Justicia Jeff Sessions de recusarse de la pesquisa.

Los investigadores se han centrado en asociados como Manafort, cuya casa fue allanada en julio por agentes federales en busca de documentos bancarios internacionales y de impuestos, y el ex asesor de seguridad nacional Michael Flynn, que se vio obligado a renunciar en febrero luego que funcionarios de la Casa Blanca dijeron que les mintió sobre su conversación con el embajador ruso en Estados Unidos.

La pesquisa de Mueller ha alcanzado también la Casa Blanca, con el fiscal examinando las circunstancias del despido de Comey. Los investigadores han solicitado numerosos documentos de la Casa Blanca sobre importantes acciones desde que Trump asumió la presidencia y han entrevistado a numerosos funcionarios y exfuncionarios.