Vecinos del estadio RFK expresan sus opiniones

Mientras los Washington Commanders continúan brillando en el terreno de juego, las autoridades del Distrito de Columbia y los directivos del equipo trabajan fuera del campo para asegurar que la comunidad perciba el nuevo acuerdo para levantar un estadio en el antiguo terreno del RFK Stadium como un beneficio compartido.

El miércoles, la oficina de la alcaldesa —junto a diversas agencias del gobierno local y representantes de los Commanders— organizó el primer encuentro comunitario desde que el Concejo de D.C. dio luz verde al proyecto.
Durante la reunión, los asistentes se agruparon en mesas de trabajo para dialogar directamente con funcionarios de la ciudad y plantear sus preguntas y sugerencias.

“En D.C. contamos con muchos pequeños empresarios capaces, preparados y con recursos para participar en las oportunidades económicas que surjan de este plan,” comentó una participante.

Muchos aficionados de toda la vida han expresado su entusiasmo por el posible regreso del equipo a la capital, luego de décadas de ausencia.

“Pienso que construir el estadio es una excelente iniciativa. Lo necesitamos. Claro, podrían desarrollarse otras cosas allí, pero tener la sede del equipo en D.C. sería algo muy positivo. Creo que generará ingresos y revitalizará la zona,” señaló Jacques Vaughan. “Además, traerá un aire nuevo a la ciudad.”

El concejal Wendell Felder, representante del Distrito 7 —donde se ubica el predio del RFK—, destacó la importancia de escuchar las ideas y preocupaciones de los residentes.

“Queremos saber cómo los vecinos imaginan el futuro de este espacio,” explicó Felder. “Se trata de un proyecto de gran escala, con múltiples elementos: infraestructura, empleos y servicios que beneficien a la comunidad.”

De acuerdo con el presidente del Concejo, Phil Mendelson, el nuevo estadio podría inaugurarse en 2030. No obstante, las áreas residenciales y comerciales previstas dentro del plan podrían completarse hacia 2040.