Hallan muerta a dueña del Don Juan

Jossmar Castillo
Washinton Hispanic

La comunidad hispana de Washington se estremeció al conocer que Rosa Ruiz Canales, la copropietaria de un popular restaurante en la Mount Pleasant, fue hallada sin vida la noche del miércoles en su casa de la Calle 13.

Un reporte de la policía metropolitana indica que la noche del miércoles uniformados y paramédicos respondieron a la escena, donde declararon que Ruiz Canales, de 48 años de edad, ya estaba muerta. Hasta el cierre de esta nota las autoridades no sospechaban que se haya tratado de un hecho criminal.

Reportes indican que fue su esposo y socio, Alberto Ferrufino, quien la halló después de regresar de un viaje a la Florida. Hacía ya tres días que no se sabía nada de ella.

Los residentes y comerciantes de Mount Pleasant, un barrio con gran historial latino, se mostraron consternados por la noticia. “La comunidad ha sufrido una pérdida irreparable”, dijo Yasmin Romero-Latin, amiga de Rosa y miembro de la Comisión de Vecindarios Consultivos (ANC) en el Distrito 1.

Rosa creció junto con Don Juan Restaurant. Antes de que tuviera ese nombre, el local era propiedad de los mellos Juan y Lorenzo. Ella era una empleada en el restaurante y cuando los dueños ponen el restaurante a la venta en 1992, Rosa y su pareja, Alberto, aprovecharon la oportunidad.

La popularidad del restaurante la compartieron con miembros de la comunidad cuando más lo necesitaron, apoyando en diversas causas sociales como mejor sabían hacerlo, con la comida.

El jueves fue un día triste en Mount Pleasant. El restaurante Don Juan, en la esquina entre la calle Lamont y Mt. Pleasant, se mantendrá cerrado por tiempo indefinido.

Rosa Ruiz Canales, dueña del popular restaurante Don Juan, en el barrio de la Mount Pleasant, fue hallada muerta en su residencia de la Calle 13 la noche del pasado miércoles, según un reporte de la policía del Distrito de Columbia.

La noticia ensombreció el ánimo de quienes la conocieron, ya fuera porque acudían a su restaurante o porque conocen la trayectoria que se forjó esta mujer de 48 años mientras operaba su negocio en la esquina de la Lamont y la Mt. Pleasant desde 1992.

“Todavía no puedo puedo creer que esto haya sucedido”, dijo Manuel López, un cliente ocasional que, a pesar de vivir en Maryland, no dudaba en viajar al Distrito por una buena comida y una cervecita.

“La señora Rosa siempre se mostró como una persona genuina, y se aseguraba de que todos en el restaurante se sintieran cómodos”, dijo López, quien también tuvo la oportunidad de colaborar como DJ en una ocasión.

Un día Rosa Ruiz podía estar detrás de la barra, otro en la cocina, o sirviendo directamente a los clientes. La mujer se caracterizó por brindar siempre una atención personalizada, pero sus alcance iba más allá de las paredes de su restaurante.

Yasmín Romero-Latin, amiga de Rosa y miembro de la Comisión de Vecindarios Consultivos (ANC) en el Distrito 1, se mostró golpeada emocionalmente por la pérdida de Ruiz Canales.

Personalmente recuerda cómo en 2008 la mujer suspendió las operaciones normales de su negocio y lo convirtió en un refugio para las inquilinos del edificio de apartamentos que fue destruido por un voraz incendio.

“Recuerdo que estaba lloviendo, y dentro de su restaurante nos brindó chocolate caliente con pan. Se quedó con nosotros toda la noche hasta que las autoridades nos encontraron un sitio para hospedarnos”, dijo Romero-Latin.

Yasmín siempre recordará lo trabajadora y buena madre que Rosa Ruiz Canales fue, ya que casi todas las semanas acudía con su esposo para disfrutar de la comida y de las noches de karaoke.

La empresaria, junto con su esposo, Alberto Ferrufino, lograron posicionar a don Juan como uno de los mejores restaurantes latinos de la ciudad de Washington. Además del restaurante, Rosa tuvo cuatro hijos con Alberto.

Aparte de un silencio poco común en la esquina de la Lamont y la Mount Pleasant, hay un pequeño letrero en la puerta del restaurante que dice que se mantendrán cerrados hasta nuevo aviso.