Al menos 35 muertos en una explosión en una mina iraní
Washington Hispanic
AP
l menos 35 personas murieron en Irán tras una explosión en una mina de carbón, según cifras actualizadas por tres agencias semioficiales de noticias, mientras equipos de rescate seguían trabajando por segundo día para llegar a las personas atrapadas bajo tierra.
Las agencias iraníes Fars, Mehr y Tasnim reportaron cifras similares el jueves por la mañana. Los medios estatales no informaron en un primer momento del aumento en la cifra de muertos. En una comparecencia en vivo en la televisora estatal, el director provincial de gestión de desastres, Sadegh Ali Moghadam, dijo que se habían recuperado 22 cadáveres.
La explosión del miércoles remeció la mina de Zemestanyurt, que se encuentra 14 kilómetros (9 millas) de Azadshahr, en la provincia norteña de Golestan.
La provincia declaró tres días de luto tras el accidente, según la televisora estatal iraní. El presidente, Hasán Ruhani, emitió una orden indicando que su gobierno emplee todos los recursos necesarios para rescatar a las personas que siguen atrapadas, según la agencia estatal IRNA.
El líder supremo Alí Jamenei expresó su congoja por el incidente “lamentable” y “desgarrador”, según el cibersitio de la televisora estatal.
“Es imperativo que se empleen todas las medidas posibles para rescatar a las personas atrapadas”, dijo Jamenei.
El estallido ocurrió a las 12:45 p.m. locales (0945 GMT), informó Ali Yazerloo, portavoz de la provincia. Varios funcionarios atribuyeron la explosión a la acumulación de gas y señalaron que es obstaculizaba las labores de rescate. Al menos 25 personas fueron hospitalizadas por inhalar el gas durante los esfuerzos de rescate.
Había confusión sobre el número de trabajadores que había atrapados en la mina, con estimaciones entre unas pocas docenas y 80 personas.
Irán, un país rico en petróleo, ha sufrido accidentes mineros similares en el pasado.
Desde que Irán alcanzó un acuerdo en materia nuclear con potencias extranjeras, el país ha iniciado un esfuerzo para renovar algunas de sus minas de carbón. Delegaciones de países como República Checa han visitado Irán con esperanza de obtener contratos.