Muere Líder defensor de los derechos laborales y fundador de Trabajadores Unidos

La región metropolitana de Washington, D.C., ha perdido a una de sus voces más respetadas en la lucha por la justicia, la equidad y la dignidad. Arturo Griffiths, fundador y exdirector ejecutivo de Trabajadores Unidos, falleció recientemente, dejando un legado imborrable de activismo, compasión y empoderamiento comunitario.

Durante décadas, Arturo estuvo al frente de la lucha por los derechos de los inmigrantes y trabajadores. Su liderazgo ayudó a formar una de las organizaciones comunitarias más influyentes de la región, abogando incansablemente por los derechos de los jornaleros, trabajadores de bajos ingresos y familias inmigrantes.

“Arturo no solo construyó una organización; construyó un movimiento”, compartió un colega. “Su capacidad para unir a las personas, decir la verdad frente al poder y actuar con integridad inspiró a toda una generación de defensores.”

Bajo su dirección, Trabajadores Unidos se convirtió en un modelo de organización comunitaria, ofreciendo servicios esenciales, incidencia política y formación de líderes. Pero el impacto de Arturo trascendió cualquier campaña o programa. Creía profundamente en el poder colectivo del pueblo, y vivió esa creencia todos los días a través de su trabajo, mentoría y compromiso inquebrantable.

En un comunicado emitido por Trabajadores Unidos, el personal y la junta directiva expresaron:
«Su legado vive en las innumerables vidas que tocó, en los movimientos que ayudó a construir y en el espíritu de unidad y resiliencia que inspiró en todos nosotros. La voz y visión de Arturo seguirán guiando nuestra misión por muchos años más.»

Arturo Griffiths será recordado no solo por lo que logró, sino por cómo hizo sentir a las personas: escuchadas, valoradas y empoderadas. Su espíritu vivirá en cada acto de justicia, en cada llamado a la dignidad y en cada paso hacia un mundo más equitativo.