Renuncia el jefe de ICE

Jossmar Castillo
Washington Hispanic

El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas, mejor conocida como ICE, por sus siglas en inglés, se queda sin un director en funciones, después de que Thomas Homan, quien estaba al frente de la agencia desde enero del año pasado, renunciara esta semana aduciendo razones familiares.

Este funcionario, con más de treinta años de experiencia gubernamental, es el encargado de ejecutar las órdenes de deportación en el país, lo que lo convierte en una de las personas más queridas y odiadas al mismo tiempo, dependiendo si muestran simpatía por los inmigrantes indocumentados o no.

“Ha sido el honor de mi vida estar al frente de los hombres y mujeres de ICE por más de un año”, sostuvo Homan a través de un comunicado, a la vez que señaló que trabajará hasta junio y luego se dedicará a su familia.

Homan era una parte vital en los planes de Trump en lo que a políticas migratorias se refiere. Sin plata para el muro fronterizo, las deportaciones han sido el arma del gobierno contra los inmigrantes sin papeles.

Durante su gestión en ICE, las deportaciones de personas indocumentadas aumentaron en un 40%, en comparación con un año antes de que tomara las riendas de la institución.

Estas cifras fueron posibles después de que el gobierno desechara los lineamientos de la administración anterior, de enfocarse en deportar únicamente a personas consideradas peligrosas y con antecedentes criminales, para deportar a toda persona indocumentada.

En noviembre del año pasado Trump lo premió con una designación oficial en el cargo de director, pero hasta la fecha, Homan no ha sido ratificado por el Congreso.

Después de que Thomas Homan hiciera pública su decisión de renunciar a la dirección del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), la secretaria de Seguridad Nacional elogió la labor que éste vino realizando desde que el Presidente Trump lo designó en el cargo.

“Tom es un patriota y un verdadero servidor público”, señaló Kirstjen. Homan dirigió la agencia con una mano de hierro, lo que provocó la admiración de unos y el repudio de otros. Homan pensaba retirarse en 2017, pero a petición del entonces secretario de Seguridad Nacional, John Kelly, se mantuvo en la agencia para dirigirla.

Ese mismo año las deportaciones aumentaron más del 40%, en especial las de personas sin antecedentes penales, que de 17 mil pasaron a unas 46 mil.

“Estamos contentos de ver que Homan se va”, manifestó Frank Sharry, fundador y director ejecutivo de America’s Voice, una organización en favor de los inmigrantes y de sus derechos civiles. Agregó que durante su mandato se enfocó en deportar a personas trabajadoras con la intención de aterrorizar a millones de personas.

Al ser cuestionado Homan siempre indicaba que no estaba haciendo nada más que cumplir con las leyes que existen.

En todo el 2017 ICE deportó un total de 226 mil 119 personas y emitió u poco menos de 14 mil ‘detainers’, que son órdenes que se entregan en las prisiones y centros de detención, para que retengan a inmigrantes indocumentados que hayan cumplido sus condenas, hasta que los oficiales federales lleguen para hacer cumplir una orden de deportación y enviarlos de vuelta a sus países de origen.

La salida de Homan se da también en momentos que el Congreso se preparaba para ratificar su nominación como director de ICE, por lo que se especula que su renuncia se registra para evitar cuestionamientos de legisladores que se oponen a su manera de dirigir la agencia.