Pennsylvania busca romper embargo sobre ron cubano

Washington Hispanic

AP

ú sabes, nosotros producimos ron», le dijo una representante cubana al senador estatal Chuck McIlhinney, que caminaba hacia su coche cuando lo presentaron a la mujer como el senador cuyo comité supervisa la venta de alcohol en Pennsylvania. «Yo le dije: ‘Sí, deberíamos comprarlo'».

Unos meses más tarde, la agencia que controla las más de 600 tiendas de vinos y licores en Pennsylvania, propiedad del estado, está trabajando para conseguir el levantamiento del embargo al ron cubano en Estados Unidos.

Una compra de ron cubano por el sexto estado más populoso de Estados Unidos sería el mayor embarque de ron cubano al país desde que John F. Kennedy era presidente y pudiera despejar la vía para que los negocios privados de venta de bebidas en el país sigan la pauta.

El embargo está vigente sobre casi todas las importaciones y exportaciones con Cuba, incluso el ron. Si Pennsylvania tiene éxito en su gestión, sería la primera importación de un producto producido enteramente por el estado cubano. El gobierno de Barack Obama permitió importaciones de carbón vegetal producido por cooperativas propiedad de los trabajadores.

En días recientes, la Junta de Control de Licor de Pennsylvania presentó la documentación inicial para comenzar el proceso de solicitud, dijo una portavoz de la agencia y ahora trabaja en la documentación adicional requerida por el gobierno federal.
Hay razones para esperanza.

La oficina del gobierno federal que vigila el cumplimiento del embargo a Cuba ha comenzado a otorgar licencias para permitir el intercambio limitado de bienes y servicios de acuerdo a regulaciones del gobierno de Obama que reflejan sus pasos en 2014 para restaurar las relaciones diplomáticas entre los dos países.

Pero también hay razones para pesimismo.

Antes de asumir la presidencia el 20 de enero, Donald Trump criticó la relajación de la tensión entre Estados Unidos y Cuba y dijo que pudiera terminarla. Se esperan nuevas regulaciones federales sobre Cuba y el Congreso no ha mostrado deseos de terminar el embargo.

«Estamos, como lo sabemos todos, en un momento de transición», dijo Pedro Freyre, un abogado basado en Miami que encabeza el bufete legal internacional Akerman LLP. «El nuevo gobierno ha enviado señales mixtas sobre Cuba. Nadie sabe adónde va a ir a parar esto».

Para Cuba, que exporta ron a más de 120 países, romper el embargo sería indudablemente un impulso económico. Estados Unidos es el mayor consumidor de ron en el mundo.

¿Para Pennsylvania? Un logro y más dinero para un sistema estatal de control de licores que es atacado constantemente por el sector privado, que dice es una reliquia de la era de la Prohibición.

«Sabe bien, tiene su mística, proviene de un lugar conocido por el producto y sabemos que se vendería», dijo el senador McIlhinney del ron cubano.

Los rones de Cuba _al igual que sus puros_ son considerados de los mejores en el mundo, dijo Robert Burr, anfitrión del Festival de Ron de Miami y editor de la Rob’s Rum Guide. Gozarían muy probablemente de un año o dos de encantamiento en las tiendas y bares estadounidenses antes de que la fascinación se disipe.

«Los bármans estarían felices de tener ron cubano para hacer daiquirí o el presidente o un mojito», dijo Burr. «Para la persona promedio sería un ron más en estantes llenos de ron».

De acuerdo con la junta de licores de Pennsylvania, los mayoristas privados hay están explorando opciones. Ni la embajada cubana ni el Departamento del Tesoro de Estados Unidos respondieron a preguntas de The Associated Press sobre el asunto, aunque la embajada emitió una declaración en la que reconoció que Pennsylvania «está interesada en crear una relación de negocios» con la embotelladora estatal de Cuba.

El argumento que Pennsylvania presenta a las autoridades federales tiene que ajustarse a la política oficial y debe mostrar cómo importar ron cubano beneficiaría la economía del estado, dijo Freyre.
No está claro cuánto tomará la decisión.