ObamaCare y DACA tienen los días contados

Víctor Caycho
Washington Hispanic

a polémica ley del ObamaCare y las acciones ejecutivas de alivio migratorio que dio el presidente Obama, más conocidas como DACA, serán los primeros objetivos de la administración del presidente Donald Trump, la que entrará en funciones el viernes 20 de enero.

Así lo avizora Rocío Vélez, reconocida analista y estratega republicana. De ascendencia puertorriqueña, ella hizo campaña por la candidatura presidencial de Jeb Busch en las primarias, “aunque no he desempeñado cargos electivos ni mucho menos cargos de dirigencia en ningún lugar”, según advierte.

Ahora que la futura administración Trump recuperó la Casa Blanca y conserva la mayoría en las dos cámaras del Congreso –“y posiblemente un cambio en la Corte Suprema”-, Vélez considera que el ObamaCare o ley de acceso a la Salud (Affordable Health Care) “es lo primero y más importante que van a tener en cuenta en su agenda”.

“Creo que ese tema va a ser una prioridad para los miembros del Congreso”, señala.

Sin embargo, considera que ellos tratarán de modificar los mandatos de los estados para permitirles un poco de expansión, “o de disminuir la contribución para expandirlos a otros planes médicos, y esa será una de las rutas que tomarán para este tema tan controversial”, explica.

Asimismo, sostiene que “el tono de Donald Trump va a bajar y se va a convertir en algo más centrista, como pasó con Obama, que cuando fue presidente electo anunció tres promesas de corte progresista y sólo logró el ObamaCare teniendo la mayoría en las dos cámaras”.

La estratega republicana vaticina que la nueva administración se va a enfocar más en el plan de la salud y en tratar de bajar corporativamente el impuesto a los ingresos. “Eso es lo que le interesa al presidente Trump –señala Vélez-, porque él buscará ayudar a los estadounidenses en sus negocios y lo hará bajando sus impuestos en un 15 o 20 por ciento, porque no creo que llegue hasta el 25 por ciento, donde Paul Ryan está en ese nivel”.

También asegura que la construcción de un gran muro a lo largo de la frontera con México es una quimera. “El mismo Trump sabe que no hay cemento suficiente, ni los 800 a 1,000 millones de dólares que se requiere para sacar del presupuesto y aumentar la deuda que ellos quieren bajar de todas maneras”, afirma.

Vélez reconoce que sí se puede hacer “un Muro Virtual, en alianza con varios estados, con alta tecnología, para reforzar la seguridad y las agencias de control fronterizo, y en ese sentido será algo simbólico pero efectivo”.

En cuando a las deportaciones masivas, sostiene que el periodo del presidente Obama fue frustrante por su récord de deportaciones, “pero fue algo que no era política de la Casa Blanca sino venía de las Agencias Fiscalizadoras”.

También advierte que los jóvenes Soñadores beneficiados por DACA y los hijos de aquellas personas que llegaron al país hace cinco a 10 años sí van a sufrir un rudo golpe. “Es una situación que me parece injusta, pero eso va a recaer en cada uno de los estados y sus congresistas van a impulsar un mandato para decir que hicieron algo al respecto,”, añade.

“Sin embargo –explica-, tratar de deportar a millones de personas que ya están en este lado y buscarlas y localizarlas, yo no sé cómo. ¿Y quién tiene los recursos para hacerlo?, ¿quién se va a dedicar a expulsarlos de Arizona o Texas, o donde los encuentren? Todo eso fue retórica con las que ellos ganaron la presidencia.

“Pero, quiéranlo o no, ya van a comenzar a ver a un Donald Trump hablando como Jeb Bush. Es decir, que aquí las personas que han seguido la ley están en la fila, haciendo su turno y han pagado como debe ser, eso no va a cambiar. Se va a reforzar las fronteras y el tono va a ser más centrista, lo van a ver”.