Licencias para todos en NJ
Víctor Caycho
Washington Hispanic
La euforia se elevó al máximo entre los grupos activistas en Nueva Jersey, luego de que los miembros de la Asamblea y el Senado estatales aprobaron, por 21 votos a favor y 17 en contra, la legislación que expande el acceso a las licencias de conducir a los inmigrantes indocumentados y otras comunidades vulnerables.
La votación se dio el lunes 16 en el Capitolio de Trenton, la capital de Nueva Jersey, y se estima que beneficiará a unos 500 mil inmigrantes con mayoría de edad y que residen en todo estado. Muy pronto podrán recabar de manera legal el “permiso certificado para conducir” que les permitirá ponerse al timón de un vehículo sin problemas así como efectuar ciertos trámites administrativos.
Cientos de personas llegaron el lunes a Trenton para ser testigos de la histórica decisión. Sólo falta que el documento sea promulgado por el gobernador demócrata Phil Murphy, quien en repetidas oportunidades se ha mostrado a favor del proyecto legislativo.
De esta manera, Nueva Jersey se convierte en el estado número 15 en permitir esta licencia para los indocumentados. Su aprobación se dio apenas una semana después de la promulgación de una legislación similar en el vecino estado de Nueva York.
De acuerdo a la iniciativa, se establece un sistema de licencia de conducir de dos niveles: el primero, que cumplirá con los requisitos federales de ID REAL, que incluyen prueba de residencia legal; y el segundo, el permiso certificado que permitirá a las personas indocumentadas obtener el esperado documento.
También se está a la espera de la promulgación de la ley para conocer los cambios que serán aplicados a los trámites para obtener la licencia de conducir.
“Ha llegado el día en el que yo podré al fin manejar un vehículo sin temor a ser arrestado, sin pagar multas, sin ser separada de mi familia e incluso sin la amenaza latente de ser deportada”, afirmó al final de la sesión Caritina Hernández, una madre inmigrante que es líder de grupo activista Cosecha, el cual formó parte de la campaña “Maneje sin Temor” (Driving Without Fear) que se desplegó desde hace dos años en todo el estado.
“Este final feliz –dijo por su parte Norma Morales, otra líder del grupo- no habría sido posible sin el apoyo de los padres inmigrantes y sus familias que impulsaron la campaña”.