Diálogo EEUU-India: Lucha al terrorismo, conflicto afgano
AP
Washington Hispanic
l combate al terrorismo y el rol de la India en la guerra de Afganistán fueron los temas que dominaron el diálogo el miércoles entre el secretario de Estado Rex Tillerson y la canciller india, en un viaje donde el diplomático estadounidense buscó delinear la política de Donald Trump hacia la región.
La ministra del exterior india Sushma Swaraj anunció que la India había accedido a sostener conversaciones sobre el conflicto afgano junto con Washington y Kabul.
Tillerson, quien llegó a Nueva Delhi tras pasar por Kabul e Islamabad, dijo que le había expresado a los líderes paquistaníes que Estados Unidos tiene «ciertas expectativas” en el combate contra grupos terroristas que operan en su territorio. Añadió que demasiados grupos terroristas han encontrado albergue en Pakistán, desde donde lanzan ataques contra otros países.
Tillerson sostuvo conversaciones con el primer ministro paquistaní Shahid Khaqan Abbasi, con el canciller paquistaní Khwaja Mohammad Asif y con los directores del ejército y de las agencias de inteligencia.
Desde hace tiempo, Estados Unidos acusa a Pakistán de apoyar o al menos tolerar al ala paquistaní del Talibán y a su grupo afín conocido como la red Haqqani. La India también acusa a Pakistán de apoyar a grupos terroristas que lanzan ataques contra su territorio, incluyendo un asalto de tres días contra la capital financiera de la India, Mumbai, en el 2008 que dejó 166 muertos.
Nueva Delhi también culpa a Islamabad por la ayuda y el entrenamiento que reciben rebeldes que operan en Cachemira, una región himalaya dividida entre las dos naciones y que ambas reclaman. Pakistán niega estar apoyando a los grupos armados.
La estrategia del presidente estadounidense Donald Trump hacia la región “sólo podrá tener éxito si Pakistán actúa decisivamente contra grupos terroristas” que operan desde su territorio, dijo Swaraj ante reporteros en Nueva Delhi.
Tillerson añadió que la presencia de esos grupos en suelo paquistaní es además una amenaza “a la estabilidad de la misma Pakistán”.