270 es el número mágico

Víctor Caycho
Washington Hispanic

No faltan quienes se preguntan por qué no se declara ganador al candidato demócrata Joe Biden si hasta el cierre de esta edición le lleva cerca de cuatro millones de ventaja en votos a su contendor el presidente republicano Donald Trump.
Lo que sucede es que si bien la gran mayoría de los procesos electorales en la nación se decide por el voto popular, eso no ocurre en las elecciones para presidente y vicepresidente.

En estos casos los ganadores se determinan por un sistema complicado y hasta engorroso que se llama Colegio Electoral, que tiene 538 “votos electorales” establecidos por la Constitución de los Estados Unidos y que se basa en el número total de congresistas que cada estado tiene en la Cámara de Representantes, a los que se suman sus dos senadores en el Capitolio de Washington.

La mayoría de esos 538 electores viene a ser 270. Es el número mágico en cada elección presidencial y vicepresidencial.
Por esa razón, Hillary Clinton no llegó a la presidencia en el 2016 pese a ganar el voto popular con cerca de 2,9 millones por encima de Trump, quien sí logró los codiciados 270 “votos electorales” y entró a la Casa Blanca.

De acuerdo a lo reglamentado, en 48 estados y en Washington DC, el ganador consigue todos los votos electorales para ese estado. Los restantes, Maine y Nebraska, asignan sus “votos electorales” siguiendo un sistema proporcional.

Este proceso ha sido cuestionado en muchas oportunidades pero sus defensores señalan que fue una manera de encontrar “un punto medio” entre el voto popular ciudadano y una votación en el Congreso.

¿Se puede cambiar ese proceso?

Sí, aunque se necesitaría una enmienda constitucional para hacerlo.

En esta ocasión, pase lo que pase, el 20 de enero de 2021 comenzará el nuevo periodo presidencial, ya sea con Joe Biden o con Donald Trump, el que logre acariciar primero la “cifra mágica” de 270.

En diciembre

En la mayoría de este tipo de elecciones se ha proyectado a un posible ganador la misma noche de las elecciones de noviembre, al terminar el conteo de la votación popular ciudadana.

Sin embargo, la votación del Colegio Electoral, que es la que determina oficialmente al ganador, tiene lugar a mediados de diciembre cuando los electores se reúnen en sus estados.

Por otro lado, cada uno de los 50 estados tiene sus propias normas electorales, pero la ley federal establece una fecha común para que se terminen los recuentos.

En esta oportunidad es el 8 de diciembre, fecha que es denominada como «puerto seguro» (safe harbor), porque es cuando toda la información de los resultados debe haber sido entregada por las autoridades electorales de todos los estados.
En una situación normal, es allí cuando empezará a esclarecerse quién será el nuevo presidente.

Las autoridades de cada estado habrán certificado la totalidad de los resultados electorales el 14 de diciembre, cuando los delegados se reúnen en cada capital de estado para oficializar su voto.

Por estados

• California tiene la mayor cantidad de votos electorales, con 55.
• Le siguen Texas con 38, Nueva York y Florida ambas con 29 votos electorales; Illinois y Pensilvania con 20 cada uno.
• Ohio con 18, Georgia y Michigan con 16 y Carolina del Norte con 15, cierran el lote de los 10 estados con mayor número de ese tipo de votos.
• En el área metropolitana de Washington, los estados de Virginia y Maryland tienen 13 y 10 votos electorales, respectivamente, mientras que DC tiene 3.

SI NO ALCANZAN LOS 270

¿Qué pasa si ningún candidato gana la mayoría de los votos electorales?
Si ninguno llega a los 270, la votación presidencial queda a cargo de la Cámara de Representantes. Sus miembros eligen al ganador entre los tres candidatos principales. El Senado elige al vicepresidente entre los dos candidatos principales restantes.

Esto solo ha sucedido una vez. En 1824, la Cámara de Representantes eligió a John Quincy Adams como presidente.
(Fuente: usa.gov)

Sin embargo, un día después de las elecciones seguía sin estar claro quién gobernará el país.

El alto número de boletas que se enviaron por correo ha retrasado unos conteos que se viven en una creciente tensión por las denuncias del presidente Donald Trump de un supuesto fraude.

El 8 de diciembre, día del «puerto seguro»

No es extraordinario que este 2020, un día después de las elecciones, hubiera estados que seguían contando votos. Es normal que el escrutinio no se complete en la noche después de las elecciones.

De hecho, generalmente muchos estados siguen contando por varios días y hasta semanas después, y son los medios y las encuestadoras quienes proyectan el ganador.

Sí es cierto que este año puede llevar más tiempo de lo habitual.

En algunos de esos estados, se permite que se contabilicen los votos por correo que lleguen varios días después del 3 de noviembre, siempre y cuando vengan con sello postal de antes de esa fecha o del día de las elecciones.