Trump emite proclama que restringe otorgar asilo

Jossmar Castillo/ AP
Washinton Hispanic

El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, insiste en hacer de la inmigración una de sus prioridades durante su mandato y el viernes 9 emitió una proclama en la que estableció que este país le negará la solicitud de asilo a aquellas personas que ingresen a territorio estadounidense de manera “ilegal”.

La postura del Presidente es contraria a lo establecido en las leyes de inmigración, que indican que las personas pueden aplicar para obtener asilo hasta un año después de haber llegado al país, sin importar su estatus migratorio. Momentos antes de viajar a Francia para participar de actos protocolares, Trump emitió la proclama en la que indica que “Necesitamos gente en nuestro país, pero deben entrar de forma legal”.

Esta nueva acción que sale del Ejecutivo afectaría directamente a unas 70 mil personas que cruzan la frontera sur de los Estados Unidos cada año y se acogen a esta medida establecida por las Naciones Unidas y adoptada por este país al firmar el Protocolo sobre el Estatus de Refugiado en 1967.

También la emitió en momentos en que cientos de inmigrantes provenientes de países de Centroamérica como Honduras y El Salvador, llegaron en caravana a la ciudad mexicana de Tijuana, que hace frontera con el estado de California.

El mismo viernes la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) y otros grupos activistas presentaron una demanda en una corte federal del norte de California para bloquear las normas, argumentando que son claramente ilegales.

“El presidente simplemente está intentando pasar por encima de la decisión del Congreso de proporcionar asilo a los que están en peligro, sin importar la forma en que ingresan”, dijo Lee Gelernt, abogado de la ACLU.

Un juez federal programó una audiencia para el lunes 19, a fin de determinar si suspende o no el más reciente cambio a las políticas migratorias. El Departamento de Justicia sostiene que la proclama emitida por el Presidente es legal.

Las autoridades dicen que los cambios a la ley de asilo pretenden canalizar a los migrantes a través de los cruces fronterizos oficiales para acelerar los dictámenes, en lugar de que intenten eludir dichos cruces en la frontera de casi 3.200 kilómetros (2.000 millas). La Patrulla Fronteriza dice que aprehendió a más de 50.000 personas que intentaron cruzar ilegalmente en octubre, un nuevo máximo este año, aunque los cruces no autorizados están muy por debajo de sus máximos históricos de décadas anteriores.

“La llegada de grandes números… contribuirá a la sobrecarga de nuestro sistema de inmigración y asilo, y a la liberación de miles… al interior de Estados Unidos”, afirmó Trump en el decreto, y calificó la situación como una crisis.

Funcionarios gubernamentales dijeron que a los que se les niegue el asilo con base en la proclama podrían ser candidatos a formas similares de protección si temen regresar a sus países, aunque estarían sujetos a mayores requisitos.