Senador Chris Van Hollen recibe el Premio Saúl Solórzano por la Justicia

Víctor Caycho
Washinton Hispanic

El jueves 20 la organización CARECEN entregó el Premio Saúl Solórzano por la Justicia, durante la ceremonia por el 37 aniversario de su creación realizada en el Willard Office Building, en DC. Su director ejecutivo, Abel Núñez, habla sobre el significado de esta distinción y de los méritos del senador Chris Van Hollen, de Maryland, quien lo recibe este año. Además, traza recuerdos del legendario líder Saúl Solórzano, de origen salvadoreño como él, con quien trabajó muy de cerca.

WASHINGTON HISPANIC.-¿Qué impulsó la creación de este importante galardón que lleva el nombre de Saúl Solórzano, fallecido líder de su organización?
ABEL NÚÑEZ: Es muy importante para CARECEN que este Premio por la Justicia lleve el nombre de Saúl Solórzano, porque él lideró esta organización por más de 20 años y a lo largo de su trayectoria luchó para que la nuestra comunidad tuviera una vida digna y una integración exitosa en el área metropolitana de Washington.

W.H.: ¿Es una manera de rendirle homenaje?
A.N.: Sí, para recordar su enorme legado. Al entregar esa distinción escogemos a personas o entidades que siguen esa lucha. Para nosotros es un orgullo honrar al senador Chris Van Hollen, porque él –y particularmente en este año- ha tomado la batuta en busca de asegurar que las personas bajo el TPS tengan un amparo. Van Hollen está luchando para someter leyes a favor de nuestra gente y con ese objetivo trabaja con otros senadores.

W.H.: ¿Qué se ha logrado hasta el momento?
A.N.: Lamentablemente el Congreso es controlado por los republicanos y no han dejado que ninguna legislación de amparo avance. Pero el hecho de que el senador Van Hollen deje escuchar su voz es muy importante. Aún más, él representa a nuestra comunidad. Basta recordar que Maryland tiene una de las poblaciones más elevadas de salvadoreños en el país. Van Hollen asume como un deber la tarea de proteger a todos los residentes y ciudadanos que viven en el estado de Maryland. Es nuestra voz ante las instituciones del Congreso.

W.H.: ¿Cómo así el senador Van Hollen personifica los ideales de Saúl Solórzano?
A.N.: Van Hollen es un líder que, como lo hizo Saúl, no deja de luchar por la justicia. Más allá de todas las contribuciones que ha hecho la oficina de Van Hollen hacia CARECEN, cuando hemos enviado delegaciones a El Salvador, su personal ha asegurado que nos den acceso en la embajada y que los funcionarios de Estados Unidos en el país de origen se reúnan con nosotros. Contamos con ese apoyo desde cuando Van Hollen era congresista y ahora senador. Por su vasta trayectoria batallando por nuestra comunidad consideramos justo que él reciba esa distinción.

W.H.: ¿Qué le viene a la memoria acerca de la figura de Saúl Solórzano?
A.N.: Saúl era una persona muy inteligente y tenía una capacidad de entender los problemas de las personas. Decía que ‘la justicia es la lucha eterna, del pasado, del presente y del futuro’, pero que nuestra tarea como institución es mejorar la vida cotidiana de las personas que buscan nuestros servicios. Quería que la gente se sienta amparada desde cuando entran por las puertas de CARECEN y que en ningún momento se detenga la lucha por la justicia. El tenía una visión y un amor al pueblo que lo hizo muy querido por la comunidad y todavía sigue viviendo no solamente en CARECEN sino en los corazones de toda la gente que lo conoció.

W.H.: ¿La actual coyuntura política ha afectado la marcha de su organización?
A.N.: Desde que se fundó, CARECEN tiene la misión de integrar a nuestra comunidad que decidió moverse hacia los Estados Unidos, particularmente al área metropolitana de Washington. Ese compromiso está en pie. Lo seguimos a través de la Clínica Legal de migración y nuestros programas de vivienda y de ciudadanía, entre otros. Pero también alzamos nuestra voz para pelear y luchar por políticas y leyes favorables a nuestra comunidad, ya sea en el concejo municipal, en el congreso federal e incluso a nivel de países de origen y de tránsito.

W.H.:¿Cómo ve el tema de la separación de los niños de sus padres y la posterior reunificación?
A.N.: Hemos participado en varias delegaciones que viajaron a la frontera para tener conocimiento de primera mano de lo que está ocurriendo en el tratamiento. A la misma vez, hemos estado trabajando con nuestros aliados a nivel nacional para luchar en contra de esta política “de cero tolerancia” de la actual administración. El sistema de la Patrulla Fronteriza no estaba listo para detener a tanta gente y en ese proceso separaron a los niños de sus padres sin tener un mecanismo para reunirlos.

W.H.: Muchos padres fueron deportados antes de la orden de reunificarlos, ¿qué cree que pasó?
A.N.: Hemos oído testimonios que a muchos padres los chantajearon para que firmaran sus órdenes de deportación, con la promesa de que iban a recibir a sus niños más rápido. Fueron deportados porque escogieron una “salida voluntaria” confiando en esa promesa. En realidad el Estado ahora mantiene la custodia de estos niños. Desde nuestra perspectiva fueron robados de estos padres.

W.H.: ¿Ante esa circunstancia que se está haciendo?
A.N.: Seguimos luchando con nuestros aliados a nivel nacional, para presionar a la administración. Nos alegra que la Corte está forzando al Departamento de Seguridad Interna (DHS) para que reúna a esas familias, independientemente de si los padres ya hayan sido deportados o no. Esta es una tragedia que pudo haberse evitado.

W.H.: En noviembre son las elecciones intermedias y CARECEN propugna que los hispanos salgan a votar. ¿Cree que lo harán?
A.N.: Eso es lo que esperamos. De parte de CARECEN siempre promovemos la participación cívica, particularmente en años de elección. Como somos una organización denominada 501 C3 no podemos apoyar candidatos, pero sí enseñamos el proceso y la mecánica del voto, para que la gente no tenga temor, e impulsamos la registración y el sufragio.

W.H.: Al cumplir este 37 aniversario, ¿cuál es su llamado que hace a la comunidad hispana?
A.N: Que no tengan miedo. Estamos viviendo momentos difíciles pero tenemos organizaciones como CARECEN que por años están acompañando a la comunidad. Y lo seguiremos haciendo. Juntos podemos hacer la diferencia. Eso implica votar, participar, estudiar, trabajar y hacer todo aquello que fortalece a la nación. Nosotros debemos empezar a ejercer ese poder plenamente.

“PREMIO COMUNITARIO” PARA CLINIC

W.H.: ¿A qué organización entregarán el Premio Comunitario?
A.N.: Este Premio Comunitario se otorga a una organización que haya ayudado directamente a CARECEN a cumplir su misión. En esta ocasión es para CLINIC (Catholic Legal Immigration Network), que provee asistencia técnica a todos los proveedores de servicios legales. Ha sido un aliado de CARECEN en el trabajo de asegurar que nuestro departamento legal tenga todas las herramientas para darle servicio a la comunidad. Nos ha traído diferentes grupos para crear estrategias y afrontar los ataques a la comunidad TPS, a la comunidad de DACA, y en general a la comunidad inmigrante.