Repartirán condones en escuelas de Montgomery

Jossmar Castillo
Washinton Hispanic

Estudiantes de cuatro escuelas secundarias del Condado de Montgomery estarán más equipados que de costumbre cuando empiecen las clases, luego de que funcionarios pusieran en marcha un proyecto piloto para repartir condones y mantener al margen el número de infecciones de transmisión sexual.

La iniciativa fue avanzada por Jill Ortman-Fouse, de la Junta Escolar, y el concejal George Leventhal, semanas después de que un oficial de salud del condado presentó cifras que muestran un aumento en las infecciones de transmisión sexual en personas de entre 15 y 29 años de edad.

“Los datos muestran claramente que tenemos un problema importante en el condado” dijo el doctor Travis Gayles. El documento que presentó indica que en el caso de la gonorrea se registró un incremento del 29% en 2017, comparado con el año anterior. Los casos de sífilis temprana alcanzaron un aumento del 85%, el doble que el promedio estatal.

El plan estará disponible en los centros de bienestar de las escuelas secundarias Gaithersburg, Wheaton, Northwood y Watkins Mills, aunque, de acuerdo con Ortman-Fouse, lo mejor es que estuviese disponible en todas las escuelas secundarias y de educación media. “Cuanto antes avancemos, mejor”, señaló.

La miembro de la Junta de Educación señaló que introduciría la medida durante la próxima reunión, que fue ayer jueves 30, pero que no esperaba que se registrara una votación inmediata. Este organismo discutió una propuesta similar en el pasado, pero no prosperó.

Algunos miembros del consejo quieren ponerlos a disposición en las 25 escuelas secundarias del condado e incluso quieren que se considere para 40 escuelas intermedias.

Y es que a pesar de las buenas intenciones que pueda tener el programa, algunos padres de familia y otros residentes consideran que el gobierno local se está entrometiendo en la labor que los padres deberían cumplir.

Otros, se quejan de que no es justo que se utilicen los impuestos de los contribuyentes para la compra de preservativos, ya que si alguien desea tener una vida sexualmente activa, debería ser capaz de comprar sus propios condones.

Leventhal y Ortman-Fouse defendieron la propuesta señalando que, como protectores de los niños y jóvenes, tienen una obligación moral de crear un ambiente que cumpla no sólo con las necesidades académicas, sino también las necesidades médicas que estos jóvenes tengan.

El concejal dijo que hay que afrontar el temas sin los estigmas que vienen incluidos cuando se tiene que hablar de educación sexual.