Condenan a mujer que mató a tiros a sus dos hijas en Fairfax

Un caso dramático y a la vez escalofriante, en el que brotaron las lágrimas y gritos de una mujer acusada de asesinar a sus dos hijas hace cinco años en su apartamento de McLean, en Virginia, y en el que también lloraban los miembros del jurado que se aprestaban a sentenciarla, se vivió en una sala de la corte del condado de Fairfax la tarde del jueves.

La acusada, Verónica Youngblood, de nacionalidad argentina, tuvo que ser desalojada por la fuerza y la audiencia fue suspendida hasta el viernes 24 por decisión del juez. Ella debe recibir una sentencia de entre 20 años de prisión y cadena perpetua por cada una de las víctimas, aunque el fiscal acusador ha pedido una sentencia de dos cadenas perpetuas. 

El miércoles, la mujer de 37 años fue declarada culpable y condenada por dos cargos de asesinato en primer grado de sus dos hijas, Sharon Castro, de 15 años, y Brooklynn Youngblood, de 5 años, perpetrado el 5 de agosto de 2018. 

La madre admitió que disparó fatalmente a sus hijas, pero se declaró inocente por demencia. Los miembros del jurado también la encontraron culpable de dos cargos de delito grave por uso de armas de fuego.

El veredicto del miércoles se produjo después de un día de deliberación y casi dos semanas de juicio, presidido por el juez del condado de Fairfax, Randy Bellows. Los 12 miembros del jurado escucharon el testimonio de los socorristas, los profesionales de la salud mental y los investigadores asignados al caso. 

La hermana, el exmarido y el exnovio de Verónica Youngblood también testificaron sobre los acontecimientos que condujeron a los tiroteos.

Los fiscales pidieron declararla culpable de asesinar metódicamente a sus hijas en su apartamento localizado en 1519 Lincoln Circle. 

El juez Kelsey Gill dijo que Youngblood compró una pistola nueve días antes del tiroteo con el propósito de matar a sus hijas y que previamente les dio unos somníferos para que estuvieran indefensas cuando les disparara.

Brooklynn murió en la escena por una herida de bala en la cabeza. Sharon recibió un disparo en la espalda y otro en el pecho, pero pudo llamar al 911 y decirles a los socorristas que su madre le había disparado. La llevaron al hospital, donde murió más tarde.

Gill dijo que Verónica Youngblood mató a sus hijas para vengarse de su exesposo, quien planeaba mudarse a Missouri con su hija Brooklynn dos días antes de los asesinatos.

 

La sentencia

El jueves, la madre de 37 años volvió a la corte. para la fase de penalización y sentencia de su juicio, pero finalmente tuvo que ser sacada de la sala después de que saltó y comenzó a gritar a los fiscales.

«¡No no no!» Youngblood gritó, mientras los agentes la sacaban de la sala del tribunal. Siguió gritando desde el calabozo mientras el juez despejaba la habitación.

El asistente del condado de Fairfax, Kelsey Gill, acababa de reiterarle al jurado que Youngblood es una asesina, no una víctima. Fue entonces cuando Youngblood se levantó de un salto y corrió al final de la sala del tribunal. Un oficial la inmovilizó mientras ella seguía gritando.

En los argumentos finales, la defensora pública del condado de Fairfax, Dawn Butorac, dijo que Verónica Youngblood, creció en Argentina en la pobreza. 

La acusada habló de cómo su propia madre y su padre la golpearon hasta que no pudo caminar cuando era niña. Su padre, dijo Youngblood, la golpeaba todos los días con un cinturón, un palo de escoba y una rama. Ella dijo que su abuelo abusó sexualmente de ella repetidamente cuando era niña.

 

Al final, el juez envió a los miembros del jurado a casa por la noche después del arrebato de Verónica Youngblood. Su defensor público espera que la cárcel la ponga bajo vigilancia contra suicidios, al menos durante la noche.