México: Partido gobernante y otros recurren a viejos trucos

Washington Hispanic
AP

a escena era tan típica del partido que durante años gobernó en México, que podría haber ocurrido hace medio siglo: mujeres pobres esperaron durante horas, bajo un sol radiante, la aparición de un político en un mítin al que estaban obligadas a asistir bajo la amenaza de perder las ayudas que reciben de un programa de lucha contra la pobreza.

Pero al contrario que hace medio siglo, había un par de medios de comunicación independientes entrevistando a las mujeres, que tenían calor, estaban cansadas e indignadas porque la utilización del programa gubernamental con fines políticos.

La conversación terminó de forma abrupta cuando trabajadores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) echaron a los reporteros y dijeron a las mujeres que dejaran de hablar. Los hombres tomaron el equipo de un camarógrafo y lo expulsaron físicamente del estadio donde se celebraba el evento, amenazando con “hacerlo desaparecer” a él y a otros periodistas.

“Cuando íbamos entrando al baño (del estadio), dicen ‘se van a morir’, Es cuando más miedo me dio”, explicó David Morales, director del servicio de noticias por internet Chiapas Sin Censura, describiendo las entrevistas a las mujeres en un mítin en Tuxtla Gutiérrez para el senador del PRI Roberto Albores Gleason durante el fin de semana.

Estas amenazas son aterradoras en las zonas rurales de Mexico, donde en los últimos años han muerto docenas de periodistas. Y reflejan lo que muchos perciben como un retorno a las viejas prácticas corruptas del gobernante PRI, que en las elecciones a gobernador de junio luchará por sobrevivir en algunos de sus últimos bastiones, como el estado de México y el de Coahuila, en el norte del país.

El PRI gobernó México durante 71 años, a pesar de acusaciones de elecciones amañadas o compradas, antes de perder en los comicios de 2000. Cuando regresó al poder en 2012 de la mano del presidente Enrique Peña Nieto, sus líderes dejaban de hablar sobre cómo había cambiado la formación.

Ahora, con varios exgobernadores del PRI encarcelados, huidos de la justicia o investigados por corrupción, el partido se resiente y la popularidad de Peña Nieto alcanza mínimos históricos. Los expertos señalan que parece estar recuperando antiguos métodos para intentar aferrarse al poder.

«Algunas personas quieren creer en este invento del nuevo PRI, pero es obvio que las democracias tienden a recompensar a los partidos que son consistentes en el tiempo”, señaló Federico Estévez, profesor de ciencias políticas en el Instituto Tecnológico Autónomo de México. «Sabes qué esperar del PRI».

Pero el panorama periodístico es diferente en la actualidad. Morales apuntó que los reporteros presentes en el acto del PRI contaban con la nueva herramienta Facebook Live. Siguieron transmitiendo en vivo mientras uno de los organizadores le decía a las mujeres que dejasen de hablar con ellos.

Al parecer, los organizadores habrían sobrepasado los límites al hacer que las mujeres esperasen durante horas a 38 grados Celsius (100 Fahrenheit), lo que las llevó a abrirse con los periodistas.

«Muchas de las entrevistadas eran beneficiarias del programa Prospera que estaban siendo obligadas a acudir a este evento”, dijo Morales.
Prospera es un programa de lucha contra la pobreza que ofrece ayudas a familias sin recursos para comprar comida y escolarizar a sus hijos.

Las mujeres contaron a los periodistas que fueron amenazadas con perder estos beneficios si no firmaban al final del mítin, una práctica común en México.

Los periodistas estuvieron retenidos durante aproximadamente una hora antes de ser entregados a la policía local, que se negó a arrestarlos.

Gleason, el político del PRI, emitió un comunicado condenando lo sucedido y explicando que es «un convencido de la libre expresión». Pero no mencionó a las mujeres que fueron obligadas a asistir al acto.

Cuatro trabajadores de Prospera en Chiapas fueron despedidos por “quebrantar la transparencia en el uso y operación de los programas sociales” al presionar a las beneficiarias para acudir al evento, anunció el Departamento federal de Desarrollo Social en un comunicado el martes.

Otro caso reciente de violencia del PRI o de sus partidarios ocurrió en su feudo del estado de México.

Cuando activistas del conservador Partido de Acción Nacional (PAN) intentaron hacer campaña en un mercado callejero semanal en un suburbio al norte de la Ciudad de México, un grupo de matones los expulsó de la zona, empujándolos, golpeándolos y señalando que no tenían autorización para estar allí.

El PRI responde a estas acusaciones diciendo que trabaja para erradicar la corrupción y citando las recientes detenciones de dos exgobernadores del partido _ Javier Duarte de Veracruz y Tomás Yarrington de Tamaulipas _ sospechosos de corrupción y otros delitos. Pero ninguno de ellos fue arrestado en el país: Duarte fue atrapado en Guatemala y Yarrington en Italia tras cuatro años huidos de la justicia, durante los que tuvo protección oficial.

Pero el PRI no es el único partido mexicano inmerso en prácticas cuestionables.

En marzo, una alcaldesa del Partido Verde Ecologista, un aliado del PRI, fue arrestada en Chiapas por supuestamente dar documentos falsos de ciudadanía a unos 1.500 guatemaltecos _ Chiapas es un estado fronterizo y los migrantes suelen asentarse ahí _ para que votaran por ella en unos comicios que ganó por un estrecho margen.

Y la candidata del PAN a gobernadora del estado de México, Josefina Vázquez Mota, fue avergonzada en público el mes pasado cuando la fiscalía reveló que algunos de sus familiares estaban siendo investigados por lavado de dinero.

Pero incluso esa revelación provocó acusaciones de manipulación del PRI. La fiscalía federal, que fue lenta a la hora de perseguir a gobernadores corruptos del PRI, se apresuró a filtrar los detalles de la investigación a la familia de Vázquez Mota _ aunque más tarde reconoció que la candidata no estaba implicada en el caso.

Algunos dicen que el último escándalo en México, que salpica al líder izquierdista Andrés Manuel López Obrador, también recuerda a las viejas tácticas del PRI.

Una sofisticada cinta de video _ editada, con banda sonora y subtítulos _ filtrada esta semana, muestra a una colaboradora de López Obrador recibiendo billetes supuestamente de un “empresario” y que irían destinados al propio político.

López Obrador dijo que se trata de una trampa del sistema político para difamarlo. La grabación se difundió más tarde como una historia patrocinada en Facebook.

La duda sigue siendo su las viejas tácticas le funcionaran al PRI, especialmente a medida que se acercan las elecciones presidenciales de 2018. Con una economía de crecimiento lento, la moneda atravesando problemas y repetidas acusaciones de corrupción, el partido gobernante afronta una dura batalla.

«No pinta bien para ellos”, concluyó Estévez.